Por Pegaso
Ahora que andaba yo volando allá, por el rumbo de la populosa colonia Benito Juárez me di cuenta de la gran necesidad y apabullante miseria en que viven algunas familias.
Es el caso de una humilde mujer y sus dos pequeñas hijas, de unos cuatro y seis años, respectivamente.
Su marido falleció. Ella está enferma y no puede trabajar. Cubre sus necesidades más elementales con la ayuda de los caritativos vecinos de la calle Manuel Negrete, donde tiene su domicilio.
Las pequeñas salen todos los días, dos veces, a recorrer las casas en espera de que les den algo para comer.
Los más desprendidos les ofrecen una porción de alimento, algunas tortillas o un refresco. Hay quienes les dan ropa o zapatos usados. Las niñas agradecen aquellas dádivas con una sonrisa y luego se pierden a lo lejos, llevando aquellos mendrugos que les permiten vivir un día más. Un día a la vez, como dice aquella melancólica canción cristiana. «Dame la fuerza para vivir un día a la vez».
Pienso que la necesidad de esta humilde familia es tal, que la madre se ve obligada a exponer a sus hijas a todos los peligros que representa andar en las calles, en estos tiempos, y más aún en un sector tan conflictivo como la Juárez.
Las pequeñas no van a la escuela. Están muy delgadas y casi visten con andrajos. Sus pies, calzados en unos zapatos rotos, se ven agrietados y su aspecto es desaseado.
Luego de su recorrido diario, regresan a su humilde morada con las manos llenas de bolsitas o paquetes con comida, lo que representa para ellas todo un banquete: Frijolitos en bola, alguna pieza de pollo, un pan bolillo, tortillas y posiblemente algún guiso que alguna señora les entregó de todo corazón.
Es su diario quehacer.
En lugar de estar aprendiendo en una escuela, luchan por sobrevivir en este mundo cruel y mezquino.
Espero que algún funcionario del DIF lea esta columna y les lleve de perdido una despensa por semana para paliar su extrema necesidad y que se les apoye de alguna manera para que puedan volver a la escuela.
Proporcionaré el domicilio a cualquier autoridad, persona u organización que quiera apoyar a esta humilde familia, si llaman a mi teléfono: 8992281623, directamente o por whatsapp.