Por José Gregorio Aguilar
La recuperación de los aprendizajes en nivel básico sigue siendo una urgencia en México y en todos los estados, afirmó el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Padres de Familia (FENAPAF) Leopoldo García López.
“No hemos avanzado nada, al contrario, fue un retroceso, y esto lo vemos no solo en Tamaulipas sino en todo el país y no estamos descubriendo el hilo negro, es la realidad”.
Lastimosamente, la situación en el sector educativo, después de la pandemia, no ha mejorado en ningún aspecto, porque no solamente no se han visto estrategias o proyectos para sacar del rezago a los estudiantes, sino que además, los recursos para el mejoramiento de la infraestructura sigue siendo insuficiente.
“Terminó la pandemia no se mejoró nada, siguieron los problemas, y todo siguió igual o peor falta de maestros, deficiencias en la infraestructura, bajo presupuesto, esa es la principal falla, hay que recordar que si no se cuenta con una buena infraestructura, con espacios dignos no puede haber calidad en el proceso de enseñanza aprendizaje”.
Al particularizar sobre el cierre parcial de las escuelas se profundizaron los problemas educativos; los alumnos no solo dejaron de aprender sino que perdieron conocimientos. Según parece, a las autoridades solo les importaba recuperar la matrícula, pero no acabar con el rezago educativo.
Además, el cierre de los planteles y el encierro de los alumnos generó un problema nuevo, es decir, el impacto socioemocional, que en muchos casos, fue negativo. En este punto se necesitaba actuar con urgencia, ofrecer atención personalizada, tutoría y ampliar las jornadas escolares pero nada de eso se hizo, al menos, no a nivel nacional, dijo Leopoldo García.
Finalmente el representante de la FENAPAF aseguró que si no se aumenta el financiamiento público para la educación, por más esfuerzo que realicen los maestros en las aulas, difícilmente se podrá aspirar a elevar la calidad educativa en México.