Por Pegaso
Estaba yo recostado en mi mullido cumulonimbus, esperando la tormenta que se había pronosticado para ayer en la tarde, cuando me enteré por medio de un portal de Internet de la noticia que ha sacudido al país en las últimas horas: ¡Atala Sarniento dejó el programa Veneneando
¡Sópatelas!¡Qué notición!
El hecho inesperado provocó ebullición en las redes sociales, y millones de televidentes se pegaron a la pantalla plana de su televisor para enterarse de los motivos por los cuales la co-conductora de ese programa fue puesta de patitas en la calle por la conductora Paty Chamoy.
Ya no me extraña para nada ese tipo de cosas que ocurren en los medios nacionales de comunicación. Se trata en muchas de las veces de verdaderas cortinas de humo para opacar una situación que molesta a los del poder, o bien, para ganar un mayor auditorio.
¿A quién diablos le interesa si corrieron a Atala Sarniento? A nadie, debería ser la respuesta, pero la verdad es que millones de personas, desde la viejita que no tiene otra cosa que hacer más que esperar el horario de sus novelas y programas de chismes, hasta las atareadas amas de casa y un número considerable de hombres que también gustan de la televisión chatarra, todos ellos son enganchados por el contenido de tales programas.
Quien vio la película «La Dictadura Perfecta» ya sabe que hay ciertas técnicas que utilizan las grandes televisoras, no sólo de México, sino de todo el mundo para distraer la atención de un extenso sector de la población. Se llama la «caja china».
Los estudiosos de este recurso y sus implicaciones aseguran que se le llama «caja china» por la similitud con las verdaderas cajas chinas. Éstas, cuando se lograr abrir, tienen otra caja adentro, y luego otra más pequeña, dentro de la cual hay otra y así, sucesivamente.
La técnica fue adoptada por los medios de comunicación hace mucho. Consiste en introducir una historia dentro de otra, como un escándalo que es tapado por un hecho todavía más escandaloso y así, se desvía por completo la atención del gran público, hasta lograr que éste olvide el primero.
No lo digo yo. «En materia política, la «caja china» es una manera de distraer, llamando la atención a otra noticia que despierta más curiosidad o inclusive, morbo. La finalidad u objetivo de esta es cabalmente distraer la atención de los ciudadanos de temas relevantes e importantes, minimizándolos ante temas de menor trascendencia. Actualmente muchos gobiernos y empresas en el mundo emplean el sistema de la «caja china» para manipular información y desviar la atención de las audiencias hacia temas escandalosos y sensacionalistas a fin de cubrir aquello que pone en riesgo la reputación del funcionario o de la propia institución». (Portal Criterio.hn)
Así pues, ahí nos tiene Tele Aztuerca retorciéndonos las manos porque se salió Atala Sarniento del programa Veneneando, con Paty Chamoy, Daniel Ponzoño y Piedrito Sola.
Es un claro uso de la «caja china» para distraernos de algo más pesado, como el uso de nuestros fondos de ahorro para el retiro con el fin de financiar la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
Sabemos que, si eso ocurre, miles de millones de pesos pertenecientes a los mexicanos estarán en riesgo, y el futuro de los trabajadores será incierto.
Vámonos con el refrán estilo Pegaso: «Carece de culpabilidad el indígena, sin embargo, sí la tiene el individuo con el que signó un contrato civil de compadrazgo». (No tiene la culpa el indio, sino el que lo hace compadre).