Por Pegaso
A continuación daré a mis dos o tres lectores una lista de salutíferos consejos para evitar el contagio de COVID-19:
PRIMUS.- Durante las fiestas navideñas y de fin de año, evitar los abrazos efusivos, mantener la sana distancia y usar cubrebocas. Si es posible, mejor no ir a esos festejos.
SECUNDUS.- A los chavos, dejar de creer que son inmunes y cuidarse más. Está demostrado que aunque no tengan síntomas, el virus se puede transmitir a las personas que conviven con ustedes, como sus mamás, hermanos y abuelitos.
TERTIUS.- A los chavorrucos, aliméntense mejor. Dejen la chela, las tripitas, la barbacha, el chesco, los taquitos de trompo y todo eso que sí llena, pero no nutre.
CUARTUS.- El COVID ataca nuestras debilidades. Si durante mucho tiempo hemos sido diabéticos o hipertensos, aprovecha dichas condiciones para infiltrarse en nuestro organismo y causar más daño.
QUINTUS.- No hay que confiarse mucho, aún cuando nos sintamos bien de salud. Podemos tener alguna enfermedad subyacente de la que no nos hemos dado cuenta.
SEXTUS.- El cubrebocas es muy importante. De hecho, ha sido vital para que la curva de contagios no haya sido mucho más pronunciada. Cuando respiramos, hablamos, tosemos o estornudamos, liberamos microgotas de saliva llamadas “gotitas de Fluge”.
SEPTIMUS.- Mantenernos a más de un metro y medio de otras personas, ayuda para que las “gotitas de Fluge” no lleguen a alcanzar nuestras mucosas.
OCTAVUS.- Aproximadamente el 50% de los contagios se debe a algo contaminado que tocamos y después llevamos nuestras manos a la boca, nariz y ojos, por donde entra el virus.
NONUS.- El virus es mutante. Es decir, que dentro de algún tiempo puede tener otras características, posiblemente más letales.
DECIMUS.- Los primeros síntomas de que tenemos coronavirus son: Fiebre, dificultad para respirar, pérdida del olfato y el gusto, puntas de los dedos de las manos sin color por la falta de adecuada irrigación de sangre.
UNDECIMUS.- El personal médico ya conoce mejor al virus. De hecho, las muertes asociadas a este patógeno son cada vez menos.
DUODECIMUS.- No es bueno bajar la guardia. Aunque la euforia de la Navidad nos invada, hay que recordar que el virus ataca en cualquier momento, especialmente cuando tenemos las defensas bajas o cuando nuestro organismo es atacado por otros padecimientos, como la influenza estacional.
TERTIUS DECIMUS.- Si hay sospecha de coronavirus, acudir al médico o hacerse la prueba. Mientras más temprano lo combatamos, mayor posibilidad de salir bien librados tendremos.
CUARTUS ODECIMUS.- Los gorditos se deben cuidar más. El riesgo de contraer coronavirus está en relación directa con la medida del cinturón. El 50% de los pacientes que contraen el COVID-19 son hipertensos y diabéticos.
QUINTUS DECIMUS.- En algún momento nos vamos a enfermar de coronavirus. Se trata de una enfermedad que llegó para quedarse, como la influenza o el dengue. Una forma de prevenirla será la vacunación, pero también se pueden evitar condiciones de riesgo al alimentarnos mejor, evitar la azúcar, las grasas y las harinas en exceso.
Y ahora viene el provervio en latín estilo Pegaso: “Proporcionémonos sensaciones placenteras durante el lapso que dure nuestra lozanía”. (Gaudeamus igitur iuvenes dum sumus-Disfrutemos pues, mientras aún somos jóvenes).