Ciudad de México.- El exfutbolista Dani Alves compareció esta mañana por primera vez en la Audiencia de Barcelona después de que el lunes saliera en libertad provisional tras haber consignado la fianza de un millón de euros impuesta como fianza, mientras se resuelven los recursos sobre su condena por abuso sexual.
Alves ha llegado alrededor de las 09:20 horas de este jueves al Palacio de Justicia de Barcelona, acompañado de su abogada, Inés Guardiola, para presentarse ante la sección 21a de la Audiencia Provincial, edificio en el que estuvo alrededor de diez minutos.
El brasileño fue condenado en primera instancia a cuatro años y seis meses de prisión por violar a una joven en los lavabos de la discoteca Sutton de Barcelona el 30 de diciembre de 2022, pero pasó en la cárcel un total de 14 meses.
La sección 21a de la Audiencia de Barcelona, sala que le juzgó y condenó, permitió la semana pasada a Alves salir de la cárcel cuando consignara una fianza de un millón de euros, con el voto particular en contra de uno de los tres magistrados, mientras se resuelven los recursos contra la sentencia que lo condenó por violación.
Finalmente, Alves abandonó la cárcel de Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), el pasado lunes por la tarde, después de haber podido consignar ese mismo día por la mañana el millón de euros impuesto por la Audiencia de Barcelona para poder salir en libertad.
Entre las medidas cautelares impuestas, destacan la retirada de los dos pasaportes -brasileño y español-, la prohibición de abandonar el país y la obligación de comparecer cada viernes ante la secretaría de la sección 21a, o el último día laborable previo en caso de que sea festivo, como pasa este jueves.
Alves llegó en coche después de haber salido de su casa alrededor de media hora antes, y bajó del vehículo acompañado de su abogada, con la que recorrió los metros que separan uno de los laterales del Palacio de Justicia con la entrada principal.
El brasileño llegó a los juzgados vestido con una camisa, pantalones y zapatillas deportivas blancas, y con una chaqueta de color marrón, con actitud tranquila y sin prestar atención a la prensa, que le esperaba al otro lado de la calle, separada de la entrada por vallas instaladas por los Mossos d’Esquadra por seguridad.
En ningún momento, ni el exfutbolista del FC Barcelona ni tampoco su abogada han hecho ningún tipo de declaración a los medios que le esperaban.
Alves estuvo en el interior del Palacio de Justicia alrededor de diez minutos hasta que, una vez cumplido el trámite, abandonó la instalación y fue de nuevo al coche que le esperaba en la esquina donde previamente lo había dejado, conducido por un amigo suyo.
Durante la breve comparecencia de Alves en los juzgados, un espontáneo se acercó a la zona donde se encontraba la prensa e increpó al futbolista con gritos de «violador», y también recriminó que haya podido salir de la cárcel a cambio de un millón de euros, entre algunos insultos.
Por su parte, la Fiscalía Provincial de Barcelona presentó un recurso de súplica contra la decisión de dejar en libertad bajo fianza a Alves -algo que también anunció que haría la letrada de la víctima-, al considerar que el riesgo actual de fuga es «incluso mayor» ahora ante la existencia de una condena.