Ciudad de México.- Con la consigna de “más becarios ni un solo sicario” arrancó el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro impulsado por Andrés Manuel López Obrador, que tendrá una inversión de 100 mil millones de pesos, mediante el cual se becarán y capacitarán a 2.3 millones de personas que no estudian ni trabajan. En la firma del primer acuerdo participarán 230 empresas. A partir de enero, los interesados podrán inscribirse.
Luisa María Alcalde Luján, secretaria del Trabajo, detalló que el programa vinculará a las personas de entre 18 y 29 años con empresas, talleres, negocios, instituciones y organizaciones de la sociedad civil, otorgándoles una beca de tres mil 600 pesos mensuales, servicio médico y un certificado que acredite la adquisición de habilidades y competencias.
Resaltó que pretenden reducir los factores de riesgo y evitar que los jóvenes se involucren en el crimen organizado. Y negó que sea un programa “clientelar” o “asistencialista”.
En una segunda etapa se aplicará el programa educativo dirigido a 300 mil jóvenes de escasos recursos que concluyeron el bachillerato y pretendan realizar estudios universitarios: se otorgarán becas por dos mil 400 pesos mensuales.
Apuestan a que plan para los jóvenes reduzca inseguridad
El secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo Montaño, afirmó que el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro tendrá un impacto “muy importante” en la seguridad, pues los jóvenes nutren la estadística criminal.
En la primera firma de convenio del programa con empresas, destacó que es una de las estrategias fundamentales de la política social del Gobierno federal, pero también de la de seguridad. “Ahora la política social acompañará en paralelo la política de seguridad”. No obstante, la dimensión de los retos del país, “si los enfrentamos juntos”, el éxito será posible y se podrá contar “con 2.3 millones de jóvenes becarios (con empleo) y no sicarios”, sin contar otros 300 mil con becas para estudiar.
En la explanada del Museo Nacional de Antropología e Historia, el funcionario expuso que esta propuesta es parte fundamental de una política social y de seguridad que impulsa el Presidente Andrés Manuel López Obrador, además de que es una de las iniciativas más nobles y tendrá un impacto importante en materia de seguridad.
Advirtió que “los jóvenes nutren la estadística criminal”, y en las actuales condiciones económicas del país este sector “ha venido constituyéndose en el ‘ejército’ de reserva del narcotráfico, y eso es lo más dramático”.
Ante ello, resaltó que con este programa se cumplirá una de las deudas históricas que como sociedad y como país se tiene con los jóvenes.
Además, felicitó a los empresarios que harán posible que cada uno de los jóvenes que hoy ni estudian ni trabajan, tengan un espacio en los centros de capacitación en las diversas empresas del país.
En entrevista posterior, acentuó que este programa y en general la política social tiene una prioridad dentro del presupuesto.
“Efectivamente hay restricciones presupuestales, pero también hay prioridades, y los recursos van a salir de ahorros que vamos a generar en virtud de un amplio programa de austeridad que se está impulsando en el Gobierno… se van a cancelar todos los gastos superfluo, los excesos y los vuelos privados…”.
También aseguró que habrá una redefinición de prioridades presupuestales, “porque desde nuestra perspectiva no se han estado ejerciendo los recursos del Gobierno mexicano en función de las prioridades”.