- El exdirector de Pemex no podrá salir del país y será vigilado en el hospital; hoy tiene otra cita con la justicia por el caso Odebrecht
Ciudad de México.- El juez de control José Artemio Zúñiga vinculó a proceso al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, por el delito de operación de recursos de procedencia ilícita como parte del caso denominado “Agronitrogenados”, pero no le impuso prisión preventiva a pesar de haberse fugado del país el año pasado.
Durante la audiencia, que duró más de 11 horas, la Fiscalía General de la República (FGR) acusó al exfuncionario de la adquisición irregular de una planta de fertilizantes inservible en 2013.
La dependencia aseguró que en el lapso en que el imputado participó en la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, y en el periodo de transición, recibió del dueño de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, depósitos en dólares equivalentes a 34 millones 133 mil 400 pesos, con los que compró una casa en Lomas de Bezares, en la Ciudad de México.
Sin embargo, la FGR no solicitó la prisión preventiva para Lozoya, por lo que se determinó que sea vigilado mediante un brazalete electrónico y que se presente ante la justicia dos veces al mes.
La medida cautelar del juez incluye mantener la vigilancia policial a Lozoya mientras siga en el hospital, donde fue internado con anemia tras su extradición desde España el pasado 17 de julio, y la prohibición de salir del país una vez que sea dado de alta. También le serán retirados sus pasaportes y visas.
Lozoya fue detenido en febrero pasado en España y aceptó ser extraditado a México tras acordar con la FGR una reducción de su pena a cambio de revelar la identidad de otros implicados en tramas de corrupción en el Gobierno de Peña Nieto (2012-2018).
El juez concedió a la Fiscalía seis meses para completar la investigación.
Se espera que Lozoya tenga hoy la audiencia por las acusaciones de cohecho en su contra relacionadas con el caso Odebrecht.
Lozoya se declara inocente; dice que fue “presionado”
Luego de 12 días de hermetismo sobre la situación jurídica del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, y las negociaciones entre su defensa y la Fiscalía General República (FGR) para obtener beneficios, ayer habló para declararse inocente.
Debido a la pandemia por COVID-19 y el precario estado de salud del exfuncionario, la comparecencia fue vía remota. Así, desde su habitación en el hospital Ángeles Pedregal, donde permanece desde el pasado 17 de julio, el exfuncionario escuchó a los ministerios públicos federales detallar la acusación que prepararon desde hace un año contra él, su hermana Gilda y el dueño de Altos Hornos de México (AHSMA), Alonso Ancira, por la compraventa de Agronitrogenados cuando Lozoya dirigía Pemex.
“Demostraré que no soy responsable ni culpable de los delitos que se me imputan”, dijo Lozoya al tomar la palabra.
Antes de que la Fiscalía solicitara al juez la vinculación a proceso por operaciones con recursos de procedencia ilícita, Lozoya añadió: “Con relación a los hechos objeto de esta investigación, fui sistemáticamente intimidado, presionado, instrumentalizado”.
“Denunciaré y señalaré a los autores de estos hechos y vuelvo a reiterar mi compromiso de colaborar con las autoridades del Estado mexicano”, agregó.
Fue vinculado a proceso por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, pero seguirá su juicio en libertad.
Hoy se llevará a cabo la segunda audiencia, pero ahora por el caso Odebrecht. De acuerdo con la FGR, la diligencia se realizará a las 09:30 horas en la causa penal 261/2019, en la que se formulará imputación contra el exfuncionario por cohecho, asociación delictuosa y lavado de dinero.