Ciudad de México.- El delantero peruano Paolo Guerrero dijo estar triste por perderse los partidos de la repesca para el Mundial de Rusia 2018 y reiteró que demostrará su inocencia en el posible caso de dopaje, que ha provocado su suspensión por 30 días, en declaraciones publicadas hoy en Lima.
«Estoy triste por no estar apoyando a mis compañeros», declaró Guerrero a Canal N en el aeropuerto «Jorge Chávez», la noche del viernes, antes de abordar un vuelo a Brasil, donde juega en el Flamengo.
A esa hora, la Selección peruana de futbol disputaba el partido de ida de la repesca frente a Nueva Zelanda en Wellington, que terminó 0-0.
«Es un momento muy doloroso, porque yo merecía jugar estos dos partidos y me los quitaron. Me sacaron de estos dos partidos», expresó el goleador de la selección blanquirroja.
Guerrero explicó que hizo un pedido a la FIFA para que anulen la suspensión, con el fin de poder disputar el encuentro de vuelta en Lima, «pero no lo aceptaron», señaló.
El delantero remarcó: «estoy demostrando mi inocencia, yo no he hecho absolutamente nada. Tengo 16 años de carrera y me sometí a millones de pruebas antidopaje y nunca tuve absolutamente nada».
«Esto es muy injusto, porque me está perjudicando mi carrera, mi imagen, mi trayectoria y me impide jugar con mi Selección dos partidos importantísimos», añadió.
La defensa de Guerrero ha argumentado que la sustancia benzoilecgonina que se encontró en la prueba de dopaje, tras el partido contra Argentina por las eliminatorias sudamericanas en octubre pasado, corresponden al consumo de un té contaminado por hoja de coca.
La sanción impuesta por la FIFA a Guerrero también le impedirá disputar los compromisos del Flamengo brasileño.