El club francés pagó 222 millones de euros por Neymar al FC Barcelona para brillar a nivel continental, algo que el PSG no ha conseguido desde la llegada de los nuevos propietarios cataríes en 2011.
Tras haber aplastado al Celtic Glasgow (5-0) en Escocia, el París SG debe ahora enviar una señal contra un grande de Europa como el Bayern, que cuenta con cinco Ligas de Campeones en su palmarés (la última en 2013).
El partido parece ideal para que el equipo francés muestre su mayoría de edad, pero la preparación de este encuentro se ha visto contaminada por las disputas entre Edinson Cavani y Neymar por lanzar un penal en la victoria contra Lyon (2-0) hace diez días.
Desde entonces, los dos delanteros no han vuelto a jugar juntos, ya que Neymar tenía un dolor en un dedo, y todo el mundo espera ver cómo se reparten los penales y escenifican una eventual reconciliación en el campo.
Aunque el Bayern no es el rival ideal para arreglar este tipo de conflicto interno, con un goleador como Robert Lewandowski, y jugadores como Arturo Vidal o Thiago Alcántara y los eternos extremos Franck Ribéry y Arjen Robben, si el holandés puede jugar.
En el equipo alemán, no todo es de color de rosa. Cuando el PSG, sin Neymar, empataba este fin de semana con Montpellier (0-0), el club alemán hacía lo propio con Wolfsburgo (2-2), con un inicio de temporada por debajo de lo esperado.