- Del Servicio Militar Nacional
Matamoros, Tam.- En presencia de sus familiares, un total de 516 conscriptos recibieron este sábado la liberación de la cartilla del Servicio Militar Nacional Clase 1999, jóvenes que representa la reserva patriótica más leal y valiente que tiene México.
La ceremonia tuvo lugar en el Centro de Convenciones “Mundo Nuevo” y fue presidida por el secretario del Ayuntamiento, Efraín Encinia Marín, quien asistió con la representación del alcalde Mario Alberto López Hernández.
Por parte de las autoridades militares, asistió el General Brigadier Diplomado de Estado Mayor, Higinio Víctor Marín Cisneros, comandante de la Guarnición Militar en Matamoros; también estuvieron presentes, el Capitán de Navío de Infantería de Marina, Sergio de Jesús Colín Cabrera; el Coronel de Caballería, Diplomado Estado Mayor, Francisco Javier Martínez Pereida, Comandante del 8º. Regimiento de Caballería Motorizada, así como integrantes del Cabildo y funcionarios municipales.
Al dirigir un mensaje con la representación del Presidente Municipal, Encinia Marín se dirigió a los jóvenes que recibieron su cartilla para manifestarles “quiero felicitarlos porque ustedes han cumplido cabalmente con su servicio militar nacional”.
Estoy seguro que deben sentirse muy orgullosos de estar presentes en este importante evento; el Servicio Militar Nacional es una obligación ciudadana, consagrada en nuestra Carta Magna; nos convoca a abrazar la milicia, templar nuestro carácter, se nos enseña a trabajar en equipo, a mejorar nuestra resistencia física y mental, pero sobre todo se nos inculca el amor a la patria, agregó.
En el gobierno de la administración del Alcalde Mario López Hernández, se trabaja a favor de la juventud para que encuentren su camino a través de la preparación, el deporte, la cultura, el empleo y las oportunidades que se les brindarán en los próximos meses.
Sean capaces de responder al momento histórico de su tiempo; sean capaces de escribir una historia personal de éxito, porque en la juventud está la semilla de la esperanza, finalizó Encinia Marín.
