En relación al impulso del proceso de revocación de mandato como mecanismo de democracia participativa en donde se garantice a los ciudadanos acudir a las urnas sin restricción laboral alguna: Faustino López Vargas
La democracia necesita una virtud: la confianza. Sin su construcción, no puede haber una auténtica democracia.
Hoy vengo a esta honorable tribuna a defender la soberanía del pueblo. Como lo advirtió el escritor Octavio Paz “Una nación sin la libertad de elegir y sin la libertad de evaluar a sus gobiernos es una nación sin voz, sin ojos y sin brazos.” Debemos comprender que la revocación de mandato es un mecanismo de democracia participativa cuya finalidad es reforzar el poder popular y es por esto que, las y los ciudadanos tenemos el derecho y la obligación de contribuir en estos procesos de constante cambio en nuestra democracia. La participación en la democracia no solo se limita al ir a votar, sino en ser jurados electorales y censales, así como funcionarios de casilla, representantes de partidos políticos, y observadores electorales.
Derivado de lo anterior, me permito pronunciarme a favor de que las y los trabajadores puedan ejercer sus derechos laborales, civiles y políticos, además de que se establezca en la ley la obligación de los empleadores a otorgar las facilidades para acudir a los procesos de revocación de mandato, sin detrimento o consecuencia alguna. De conformidad con datos del INE, en las pasadas elecciones del año 2021, se tiene registro que de los 93 millones de electores hubo un porcentaje de participación de entre el 51.7 y 52.5 por ciento, mientras que en las elecciones de 2018 la participación fue de 62.3 por ciento.
La pregunta es. ¿Cuántos de las y los electores restantes no pudieron acudir a votar porque en sus trabajos no se les permitió acudir a las casillas?
Ante el avance democrático que ha tenido nuestro país en los últimos 4 años no podemos permitir un retroceso, al contrario, es nuestro deber fomentar progresivamente la participación ciudadana.
Hay que considerar que la democracia no solamente es una estructura jurídica y un régimen político, sino es un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo.
Es por esto que, es necesario que las cifras de participación incrementen y alcancemos el máximo porcentaje de participación en cada jornada electoral.
Es necesario que todas y todos tengamos las facilidades de acudir a las casillas a ejercer nuestro derecho, y que ya no sea una limitante el trabajo que desempeñemos. Les invito a todas y todos los presentes a ser parte de este avance, de votar a favor y hacerle frente a esta problemática en la que claramente se vulneran los derechos de las y los trabajadores mexicanos. Estamos ante un nueva forma de hacer valer los derechos políticos en México, que sea el pueblo el que bajo su soberanía decida el rumbo de nuestro país, sin excluir a nadie.
