Por: Chano Rangel
Claro quedaron los números en la leal e invicta ciudad de Matamoros, cuando en la búsqueda por ocupar un lugar en la boleta del distrito IV Federal, con cabecera en la ciudad, el actual alcalde Mario López Hernández se llevará los números de calle.
Con un número superior al 56% de las preferencias electorales en términos reales, Mario López, se alza sobre cualquier contrincante en este rubro, muy por encima incluso de sus adversarios de otras fuerzas políticas y haciendo palidecer a los mismos de su propio partido político.
Para el alcalde de Matamoros, tener esta medición que lo coloca como puntal en una elección competida, le da un hándicap a favor, que le permitirá en corto tiempo tomar la decisión de ir por la búsqueda del escaño en la cámara baja.
Sin temores estos números, no solo asustaron a la oposición, si no también hacia el interior del morenísmo, por la sencilla razón, que la fuerza del alcalde es la mejor plataforma para consolidar una victoria posible, quien no lo vea así, se tendrá que medir en las consecuencias de los resultados.
Por otra parte, todo parece indicar que la cosas hacia la búsqueda del senado en Tamaulipas, empiezan aclararse, desde el sur Olga Sosa y desde el Norte Maki Ortiz, la primera con un sello peculiar, y la segunda con carrera política impresionante.
Para los conocedores una garantía de triunfo seria la ex alcaldesa de Reynosa, Maki Esther Ortiz Domínguez, que en su currículo anota en primera línea, el no haber perdido hasta la fecha ninguna elección en las urnas electorales, tener el récord de más voto obtenidos en una elección municipal, con 150 mil, y ser de las pocas mujeres de la política tamaulipeca en ocupar una subsecretaria de estado en el país, ser senadora, diputada federal y alcaldesa de la ciudad más grande de estado.
Así mismo como dice el dicho, para que la cuna apriete tiene que ser de la misma madera, de darse el caso de la propuesta de Mariana Gómez Leal, como aspirante al senado por el PAN y la Alianza, esta sería una competencia para analizar y discutir, se pondría buena, y en esa lucha muy difícil se pondría para la sureña Olga Sosa, la competencia, en el norte refine todo.
El fuerte peso electoral del norte del estado pone en desventaja a Olga Sosa, que no termina de prender el ánimo en esta región de Tamaulipas, y fuera de los eventos organizados por los alcaldes morenistas, y las estructuras municipales, no se sabe cuál ha sido su mayor logro organizacional políticamente hablando ya solita y como cabeza de un grupo político.
Así las cosas, una vez definidos por el senado, la posiciones 1 y dos, será las diputaciones federales, y para mar tardar allá por febrero del 2024, donde se conocerán los candidatos alcaldes y diputados locales, es donde se cerrara la pinza y el estirón final hacia el proyecto nacional se tendrá que redefinir o reorientar en base cada uno de estos personajes locales, porque el esperar que un tsunami guinda como en el 2018, y se lleve a todos al triunfo es cosa poco probable, el que provoco esa situación ya no aparece en la boleta electoral y su sexenio está por terminar.
Serán elecciones competidas, cerradas, en juego están dos proyectos de nación muy distintos uno de otro, por un lado, el debilitamiento de las instituciones como ya lo ha dado a conocer el presidente, que sigue en la terquedad de desaparecer al INE, y someter a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y por otra parte seguir creciendo de manera global y con aspiraciones propias, con educación, investigación, desarrollo y una visión del mundo actual.
Crecer con programas del pasado, no ha sido una buena idea, hoy nuestro país retrocedió en atención de Salud Pública, en Educación, en Desarrollo, Ciencia y Tecnología, y la deuda adquirida por este gobierno de la 4T, que tratan de ocultar tarde o temprano reventara el sistema endeble financiero mexicano.
La prueba de fuego está en el 2024.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Nuevamente salen a relucir los números en la ciudad de Reynosa, donde de nueva cuenta y de manera sólida, el alcalde Carlos Peña Ortiz, es quien encabeza todas las preferencias electorales y de percepción en todos los sentidos ciudadanos.
Carlos Peña, aparece con un 50% de posibilidad de triunfo, contra un 9.8 % de su más cercano perseguidor, si se le pudiera llamar adversario, a un número tan dispar.
Además de esta anotación cuando se cruza los números, contra los adversarios políticos, que pudieran hacer frente en esta contienda, lo números crecen a favor de Peña Ortiz, sacando una ventaja de 58% puntos, sobre 11.8 % de Gerardo Peña Flores, y 8.2 del MC. Quienes en lo aparente serían los contendientes.
Con estos números el partido Morena, no tendrá ninguna oposición para retener en sus filas el gobierno reynosense, al menos que los dirigentes quieran complicarse la existencia, como suele pasar en algunos puntos de la política.