Por: Chano Rangel
El gobernador priistas de Coahuila, Miguel Riquelme, está aguantando candela los fogonazos no pudieron llegar en otro momento, que en pleno proceso electoral, si poquito quería el huésped de Palacio Nacional, y la desgracia de los mineros atrapados en las minas de Sabinas, le dieron los argumentos para el ataque político.
Al presidente poco importa la desgracias de muchas familias de la región carbonífera de Coahuila, al mandatario lo que asomo le interesa es la elección para gobernador de 2023, donde Miguel Riquelme será sustituido, de inmediato la 4T, hace de las desgracias un acto político de campaña y se mete a trasgredir el proceso electoral en ciernes del estado norteño.
Todo iba bien para la 4T, el derrumbe de la mina, los 10 mineros atrapados en Las Conchas, era un buen trampolín para desprestigiar al gobernador, que no crea que no estaba siendo vigilado, pero al no encontrar nada relevante, la región carbonífera y sus problemáticas, le dieron pauta al gran elector morenistas, para el lanzamiento de misiles electoreros.
Como comento todo iba bien, pero resulta que a levantar tantito la tierra, los primeros en brotar no fueron difuntos, si no contratos en lo oscurito con la CFE, y como usted podrá adivinar con la participación de Manuel Bartlett, el octogenario director de la empresa productiva del estado; los primeros nombres brotaron como la pus; Régulo Zapata Jaime, Fernando Mendoza Bernal, Tania Flores, alcaldesa de Múzquiz, y su hermano Antonio, como los principales operadores políticos de Morena en la región del carbón y favorecidos con contratos por la Comisión Federal de Electricidad, por montos que van de los 200 a los 250 millones de pesos.
Contratos como usted sabrá que no se licitaron, tampoco se transparentaron y fueron dados como la mayoría de los contratos de esta administración federal, por la vía de la asignación directa “que disque, para que no haya corrupción”, ese es el argumento, y con este tema de los contratos es la especialidad del menú de tropelías de Bartlett Díaz.
Todos estos nombres incluida la alcaldesa de Múzquiz, Tania Flores de “casualidad, pura casualidad” operan las aspiraciones de Ricardo Mejía, sub secretario de seguridad pública federal, para que sea candidato al gobierno del estado, de la región carbonífera, salen los apoyos al aspirante y es el bastión del morenismo, que desde que Bartlett, agarro la batuta vía contratos de compra de carbón, poco a poco ha ido quitándole al PRI espacios políticos en la región.
Pero hay más Armando Guadiana, senador de la república, es empresario minero, y que apoya al movimiento de López Obrador, morenista y como pago a su fidelidad, el gobierno federal, ha condonado deudas fiscales, por más de 2 mil millones de pesos, salen más nombre a medida que las investigaciones avanzan.
Sin lugar a dudas, algún asesor debería de decirle al presidente de la república, que la corrupción en las minas coahuilenses, es una verdadera cloaca de estiércol, que los contratos de la CFE, existen y que los mayores beneficiarios son los patrocinadores del morenismo en la entidad, que no se asuste el mandatario, el mismo dijo, que el presidente de México, es el mejor informado y que nada pasa sin que este lo sepa, esperemos que sepa que aparte de haber 10 familias y miles más en manos de explotadores de minas, hay intereses políticos que podrían ensuciar aún más el luto familiar de los coahuilenses. Es cuánto.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Para muchos la falta de lluvias se debe al cambio de clima, a este tema tan recurrente, pero que pocos toman en serio, la ausencia del vital líquido en muchas regiones de Tamaulipas, empieza a tener estragos en la población.
Hace algunos días platicamos con Ignacio Olmedo, regidor del ayuntamiento de San Fernando y vecino de la región de Carbonera en la Laguna Madre, brevemente me explicó que la falta de precipitaciones pluviales, afecta de manera drástica la captura de crustáceos y pescados, encareciendo los ingresos de muchas familias dedicadas a esta actividad primaria.
La oxigenación que provocan las lluvias no ha sido posible, y la pesca cada día se tiene que hacer más adentro del mar, ocasionando más riesgos para las embarcaciones y los pescadores.
Sin las lluvias se torna complicado la pesca productiva y se hace insostenible el ingreso familiar, por estas razones es preciso hacer gestiones y ayudar en la medida de lo posible a mitigar a las cientos de familias que viven de la pesca en la zona del mar de San Fernando.
