POR José Inés Figueroa Vitela
¿Qué ocultan los responsables de las dependencias públicas cuyas páginas electrónicas no exhiben la información a que están obligados por la ley?
Claro, ocultan la información pública de oficio, pero en el acto, en principio lo que despiertan, es la sospecha de que están haciendo mal uso de los recursos del pueblo.
Ahora que el alcalde de Matamoros, MARIO LÓPEZ, en su calidad de Presidente del Consejo, encabezó el pleno de la Junta de Aguas y Drenaje, le pidió al Gerente General le diera cuenta de los sueldos de los gerentes; la plantilla de personal y la cartera vencida, entre otros temas.
Esa, es parte de la información que debería estar al acceso no solo del Presidente del Consejo, sino de toda la ciudadanía, por mandato de ley.
Pero en la página electrónica de la institución, entre las 48 obligaciones de información pública que debe exhibir, 19 están inaccesibles bajo el argumento de “proceso de carga” y son precisamente las correspondientes a los temas de mayor interés social.
Entre ellas, la estructura, facultades, gasto de representación y viáticos, contratación por honorarios, declaración patrimonial, deuda pública, presupuesto, recursos públicos, dictamen financiero, ingresos y estudios financiados.
De los otros rubros, la mayoría están desfasados, corresponden a años anteriores y los que se declaran “actualizados”, igual abundan en inconsistencias.
De este año solo aparece el directorio, pero sigue incluyendo a cuatro funcionarios que a principios de año fueron cesados; en las “condiciones generales” aparece en blanco el apartado de “recursos públicos asignados”; las “convocatorias a concursos” se refiere a “para cargo públicos” y también está en blanco… ¡y párele de contar!
De la reunión aquella, lo más que pudo sacarle el alcalde al Gerente GUILLERMO LASH, es que la JAD debe más de 600 millones de pesos y está en condiciones “difíciles de operar” por el pago a los acreedores.
Cosa por demás extraña, cuando en el informe de deuda pública enviado al Congreso y publicado por el Periódico Oficial del Estado, al 30 de junio pasado, el saldo de los únicos créditos aprobados y en proceso de amortización de la JAD sumaban 214 millones 743 mil pesos.
¿A quiénes le deben, de qué y con autorización de quién los otros casi 400 millones de pesos?
Pero, además, no será tan onerosa la carga financiera documentada, cuando en los casi dos años de la Gerencia del señor LASH solo le han abonado al capital menos de 9 millones a uno de los créditos y menos de cuatro millones al otro; uno que por 110 millones se contrató en el 2006 y el otro por 165 millones, en el 2 mil 12.
Reestructurar la deuda para disminuir las amortizaciones, como se hizo creer al alcalde sería la solución, evidentemente es otro fiasco.
¿Qué hacer entonces? “Vamos a correr empleados”, volvió a sentenciar el cuestionado Gerente, con esa frase que supone es la solución de todos los males por él personalizados.
Cuando recién lo nombraron en el cargo, a finales del año antepasado, lo primero que hizo fue despedir a 20 empleados; a inicios del año pasado anunció despidos de otras 60 personas; en los primeros días de este se siguió despidiendo a cuatro funcionarios.
Ahora que la hoja de la sospecha vuelve a pender sobre su cuello, su respuesta es la misma: más despidos.
¿Hacen falta argumentos para actuar contra el Gerente de la JAD -¿cómo se dice al que viola la ley?-… delincuente?
Consígnenlo o no, sale sobrando concluir qué es lo primero a hacer para empezar a resolver el problema de la Junta de Aguas matamorense.
Si alguien quiere agarrar corte, seguramente va a encontrar tela de donde cortar con esos ejemplos.
CARLOS GARCÍA GONZÁLEZ, quien en sus tiempos de candidato a la alcaldía, fue visto muy de cerca de la JAD, ya no podrá hacer mayor cosa sobre aquello, como diputado y como alcalde menos, porque al primer encargo prácticamente “renunció” ahora que, habiendo perdido la elección, se fletó como Secretario de Desarrollo Económico del Estado.
En esta nueva condición ahora emprende gira estatal, iniciada por la zona conurbada del sur donde hizo evento grande para repartir 3 millones de pesos, en calidad de préstamo, a 219 parviempresarios.
Si fue de a partes iguales les tocó de a poco menos de 15 mil pesos por piocha, para hacer sus negocios y después pagar, eso sí, con módicos intereses.
Mientras tanto la subsecretaría de Pesca y Acuacultura del Estado ya empezó a fabricar y distribuye, hamburguesas hechas a base de desechos -cabezas- y pulpa de pescado, con un alto contenido nutricional, buen sabor y a bajo costo.
Se trata de un plan piloto que llega 3 mil familias del Estado, las cuales son sujetas de estudio y monitoreo, para determinar en tres meses el impacto en su desarrollo y condición física, en principio a través de los programas alimentarios impulsados por el sistema DIF estatal.
De ello y otros temas sectoriales, como los proyectos y programaciones presupuestales para el año entrante, considerando una expansión en la acuacultura, con el nuevo filón de la explotación del ostión para exportación, como un atractivo negocio, habló ayer en Diálogos en Claroscuro el subsecretario RAÚL MANZUR MANZUR.
Ayer tarde corrió como reguero de pólvora la noticia de la muerte del exalcalde, exdiputado y exfuncionario público, ARTURO CORTEZ VILLADA, originario de Veracruz pero radicado la mayor parte de su vida en Nuevo Laredo, desde donde hizo su carrera política, pública y dentro de la iniciativa privada.
Los informes oficiales eran escuetos, pero todo apuntaba a otra víctima de la violencia.
Para mañana, la SAGARPA corre invitación a los ganaderos a un curso en el cual especialistas les van a instruir sobre identificación, prevención y control de enfermedades que pueden atacar sus hatos; será en las instalaciones de la Asociación Ganadera Local de Victoria.
Por su lado, investigadores de la UAT identificaron variaciones genéticas en especies de ardilla y nutria dentro de la zona de la reserva de la Biósfera El Cielo, al suroeste de la geografía estatal.
Los cambios en la pigmentación del pelo y la piel natural de estos especímenes son motivo de estudios por los especialistas del Alma Mater tamaulipeca para determinar el origen y sus connotaciones.
Mientras tanto, esta semana se hicieron efectivos una serie de cambios de adscripción de sacerdotes dentro de la Diócesis de Victoria; entre ellos, el Padre ISAIAS MORALES asumió como párroco del Santuario de Guadalupe y el Padre ANDRÉS FIGUEROA se integró a la iglesia del Sagrario, Catedral.
En la emotiva despedida hecha por la feligresía de la Iglesia del Buen Pastor, de donde proceden, escuchamos ricas anécdotas de don RAÚL VILLARREAL CABALLERO, constructor y benefactor de este templo desde su origen.
El recibimiento en la nueva misión pastoral para los apreciados clérigos fue igualmente generosa.