Saransk, Rusia.- El ímpetu de Irán y los caprichos del VAR estuvieron a punto de provocar un sismo en Portugal, que sufrió para empatar 1-1 y pasar como segundo del Grupo B del Mundial 2018, y jugar contra Uruguay en octavos de final.
Ricardo Quaresma adelantó a los lusos poco antes del descanso (45) y Cristiano Ronaldo tuvo un penal para sentenciar, pero Ali Beiranvand le detuvo el disparo y eso acentuó los nervios de los portugueses.
Irán empató en el descuento con otro penal ‘chivado’ por el VAR que transformó Karim Ansarifard (90+3) y tuvo una ocasión aún para llevarse la victoria, pero los lusos finalmente salvaron el punto que les dio la clasificación.
Portugal sufrió mucho ante un rival que ya había demostrado contra España su capacidad defensiva.
Cristiano Ronaldo amenazó nada más comenzar el partido (3 minutos) pero se fue diluyendo con el paso de los minutos, al punto de que perdonó la sentencia al inicio del segundo tiempo, lanzando un penal que le paró Ali Beiranvand.
Poco antes del descanso, las cosas se habían puesto bien para los campeones de Europa, con la jugada favorita de Ricardo Quaresma: arrancada desde la derecha, pared con Adrien Silva y antes de pisar el área conectó con el exterior de su pie derecho un disparo que se coló por la escuadra (45).
Tras el error en el penal de Ronaldo y un final de partido marcado por el VAR, que dio un penal a los iraníes para colocar el 1-1 en el 90+3, los lusos se vieron presionados por el ímpetu del rival.
En el descuento, Mehdi Raremi tuvo la ocasión de hacer historia para su país, pero su remate lo estrelló en el lateral de la red (90+5) y los campeones de Europa por fin pudieron respirar tranquilos.
El empate da la segunda plaza del grupo B a Portugal, por detrás de Espala (que empató 2-2 con Marruecos) y obligará a los lusos a enfrentarse a Uruguay en octavos, el sábado en Sochi.