Por: Chano Rangel
A partir del día de hoy, 15 de septiembre de 2022, faltan exactamente dos semanas, para el poder cambie en Tamaulipas, independientemente de lo que resuelva el tribunal, por los últimos alegatos presentados por el PAN y la Alianza que compitió en la pasada elección estatal.
Por los hechos y acontecimientos, los resolutivos que presentó el Tribunal Federal Electoral, se torna difícil una decisión distinta a otros estados como Oaxaca, Hidalgo, Durango y Aguascalientes, donde le dieron la razón al ganador en las urnas.
En Tamaulipas, desde hace algunas semanas a comenzado una gabinetitis aguda, porque la mayoría se siente con los arrojos y los argumentos para formar parte del gabinete estatal que entrará en funciones el próximo primero de octubre.
Se ha filtrado en algunos medios que el gobernador electo Américo Villarreal no contempla tener dentro de su gabinete a presidentes municipales en funciones, aunque este comentario se rompería con la inclusión del Calabazo Villegas en el equipo de transición.
Son muchos los que se sienten con derecho, pero las secretarias, que son las de más alto nivel dentro del organigrama estatal, parece ser que ya están palomeadas, hay que cumplir con los compromisos, como lo hacen todos los gobernadores entrantes, aunque al final terminan gobernando con puros amigos cercanos, porque los compromisos se van quedando en el camino.
Pues a razón de estos hechos, mucho se habla de quien podría ser secretario de gobierno, se habla y los expertos en comentarios de pasillo, dicen que será el Calabazo, alcalde con licencia de Río Bravo, que de Matamoros vendría la titular de Finanzas, que de Reynosa, la secretaría de Salud, y desde el sur, algún apostolado para la secretaría de obras públicas, y en esa área, eso amigo de Fernando Cano.
Se menciona a Marcelo Sierra, ex sub tesorero en Reynosa y Matamoros, hombre de confianza de José Ramón Gómez Leal. Además el contador Sierra, es quien ha estado los últimos manejando los recursos y contraloría de la súper delegación.
De ser cierto, el gabinete quedaría con la mitad de hombres y la mitad de mujeres, al estilo AMLO, y también de Nuevo Laredo, tendría reservada una silla de las arriba, de las secretaria la duda es saber cuál sería.
Sin embargo, se podría dar el caso, con el cruce de grupos políticos, que de Reynosa puedan surgir, no uno sino varias posiciones de primer nivel, caso igual sería el de Matamoros, donde la victoria fue más abultada y por consiguiente el edil lleva mano en las decisiones.
Ya falta poco para descifrar la incógnita estamos a unos días, la temperatura arrecia y los dimes y diretes, de un lado y de otro están a la orden del día, nomás lo que no queremos los tamaulipecos, es que tres años después vayan a salir, que no se ha hecho nada por culpa de los que se fueron, por el pasado y por aquellos neoliberales que dejaron todo desordenado, y que por esas razones ha sido imposible realizar las cosas bien en la entidad. Espero también estar equivocado. Es Cuanto.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Hace algunos meses los y las diputados de Morena, le dijeron de todo a Leticia Sanchez Guillermo y Consuelo Lara Monroy, cuando decidieron abandonar la banca de ese partido en el congreso del estado.
Ahora Luis René Cantú y Félix García Aguiar, tendrán que remar contra corriente, porque no fueron capaces de retener a los congresistas en sus filas; de Leticia mejor ni hablo, ella si se portó mal, como dice el corrido, los millonarios acuerdos, se tendrán que ir al baúl, ya se fueron y el coraje de los morenistas se lo tendrán que tragar, con un “ustedes disculpen, bienvenidas a casa”.
Leticia Sánchez, diputada por Matamoros, salió más viva que bonita, acepto los cañonazos de un lado, y las rayadas de madre de sus compañeros, pero maldito dinero, al final todo regreso en un “usted disculpe” andaba mal, pero ya regrese, y sus compañeros en la prisa y la urgencia de hacer algo bueno y de altura, se tuvieron que digerir su propio veneno.
De Sanchez Guillermo, no podrá ir a la reelección, porque ya cumplió su periodo de dos consecutivos, la cuerdita se la pasó 5 años cobrando en el congreso local, de iniciativas, mejor ni hablar, pero ahora que ya está por morir el gobierno cabecista, y no ver claro su futuro, entonces regresa a las filas de Morena, al fin que ahí aceptan de todo, incluso a los traidores, pero quien traiciona una vez, traiciona dos veces.
Los que sí están para el olvido, son el Cachorro Cantú y El Moyo García, de los dos no se hace uno, y todavía quiere repetir el liderazgo del PAN en Tamaulipas, con tantito decoro, ya se hubiera ido del partido.