Aviones militares estadounidenses dejaron caer 36 toneladas de bombas en una isla del río Tigris «infectada» de miembros del grupo extremista ISIS, según informó la coalición liderada por Estados Unidos.
Aeronaves F15 y F35 participaron en el bombardeo de la isla Qanus, en la provincia central de Salaheddine, al norte de la capital Bagdad, «un refugio seguro y un importante punto de tránsito para el ISIS», informó en su cuenta de Twitter el Comando Central de las Fuerzas Aéreas de EE.UU.
Un video difundido por el portavoz de la coalición, coronel Myles B. Caggins III, muestra un gran número de impactos en cadena que cubren toda la superficie de una isla fluvial en el río Tigris y a oficiales observando el resultado a la distancia .
En un comunicado, la alianza precisó que las fuerzas emplearon 80.000 libras de munición, unos 36.290 kilos, y que el objetivo de la acción era evitar que los yihadistas se escondan entre la densa vegetación de la ínsula.
Las fuerzas de seguridad luchan contra los yihadistas en varios puntos del país, donde aún tienen presencia después de haber perdido casi todos sus dominios territoriales a finales de 2017, cuando el gobierno iraquí declaró la victoria sobre este grupo.
Aeronaves de las fuerzas iraquíes, Estados Unidos, y la coalición internacional que combate al yihadismo en Siria e Irak lanzaron hoy más de 36 toneladas de bombas contra una isla de la provincia septentrional iraquí de Saladino que se había convertido en refugio del grupo terrorista Estado Islámico (EI). La operación, llevada a cabo por las tropas de la coalición liderada por Estados Unidos y las unidades antiterroristas iraquíes, tuvo como objetivo la isla de Qanus, «un refugio seguro y un importante punto de tránsito para el EI», informó en su cuenta de Twitter el Comando Central de las Fuerzas Aéreas de EE.UU. Un vídeo difundido en esta red social por el portavoz de la coalición, coronel Myles B. Caggins III, muestra un gran número de impactos en cadena que cubren toda la superficie de una isla fluvial en el río Tigris y a oficiales observando el resultado desde la distancia. En un comunicado, la alianza precisó que las fuerzas emplearon 80.000 libras de munición, unos 36.290 kilos, y que el objetivo de la acción era evitar que los yihadistas se escondan entre la densa vegetación de la ínsula. Ahora, efectivos peinan la zona para despejarla y eliminar cualquier remanente del EI. La nota insiste en que, en línea con su procedimiento habitual, han tomado medidas «extraordinarias» para prevenir las bajas civiles en la operación. Las fuerzas de seguridad luchan contra los yihadistas en varios puntos del país, donde aún tienen presencia después de haber perdido todos sus dominios territoriales a finales de 2017, cuando el gobierno iraquí declaró la victoria sobre este grupo. En las últimas semanas, Bagdad ha anunciado nuevas acciones para acabar con los restos del EI, que todavía mantienen actividad en diversos puntos del país. EFE LEE: Estados Unidos rinde homenaje a víctimas del 11S a 18 años de los atentados terroristas LEE: EE.UU.: hombre apuñala al menos a 6 personas en una empresa de Florida