Por: Chano Rangel
Desde el 2018, las cosas cambiaron el PRI cayó en las preferencias electorales y el único partido que mantiene su posición es el PAN, su estructura y conformación desde su origen depende de sus propios militantes y no de un estado paternalista, como si lo fue el priismo y lo está siendo el morenismo.
Hace tres décadas, todo se formaba en “Solidaridad”, de ahí salían diputados locales, federales, senadores, alcaldes y gobernadores, hasta un candidato a la presidencia salió de este terreno, que no llegó a su cometido, porque una bala cortó su vida, y Colosio no pudo llegar a la presidencia de la república.
Ahora todo sale de los programas de Bienestar, de ahí salen los súper-delegados de la 4T, y la competencia política en su mayoría ex priistas, que han encontrado en Morena, la oportunidad de regresar al presupuesto y al poder político en todas las áreas de gobierno. Los últimos triunfos se dan con ex priistas, y la sumisión de los gobernadores priistas para que la 4T, llegara a sus estados, el caso está en Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo, en la última elección y en el 2021, los sumisos fueron Sinaloa, Sonora, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Colima, Chiapas, que ahora ya esos mismos cuentan ya con funciones como embajadores, cónsules y puestos en el gobierno federal, por su entreguismo a la 4T.
Pero hay otro camino, el que muchos están viendo, los insumisos, de esos hay pocos, uno de ellos está en Tamaulipas, Cabeza de Vaca, no se doblegó y en respuesta recibió toda la fuerza del estado federal en su contra, la UIF, la Fiscalía y algunos jueces, que construyeron un andamiaje en su contra, por no doblegarse ante los deseos del presidente de la república.
El otro caso, es de Alejandro Moreno Cárdenas, ex gobernador de Campeche y líder nacional del PRI, que está viviendo en estos momentos todo el peso y persecución política del gobierno federal, desde el gobierno de Campeche, la vetusta Layda Sansores, está haciendo el trabajo sucio del gobierno federal, a través de grabaciones ilegales del teléfono personal de Alito Moreno.
El celular de Moreno, fue intervenido por mucho tiempo, desde la SEGOB, y es esta dependencia la que da el material a la gobernadora de Campeche; para que desde ese estado se mancille y ataque políticamente al líder nacional del PRI, su pecado es no apoyar la reforma eléctrica, y no ser parte del entreguismo en las pasadas elecciones.
La insumisión tiene un costo, está la están viviendo el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca y el líder del PRI, Alito Moreno, delitos quizá allá, pero es por eso su persecución, sino por la osadía de ser insumisos.
El PAN, seguirá siendo la segunda fuerza política del país, su estructura y formación, así lo mantendrán, pero tendrán que ser y usar más su capacidad, ya tuvieron la presidencia en dos ocasiones, pero la falta de pericia para construir una estructura ganadora, como si la está construyendo López Obrador, los dejó fuera de competencia, su visión conservadora y empresarial, no les dio el margen de fomentar los apoyos sociales, pero si dejar el país creciendo económicamente, pero esto no llegó a las bases sociales que en este país son la mayoría.
Es precisamente en la bases sociales donde AMLO, mantiene su fuerza, aunque económicamente el país esté hecho pedazos, con inflación que superó el 9%, pero la dádiva sigue llegando, y el clientelismo electoral está firme aún con la 4T, en eso tendrá que trabajar la oposición, en Tamaulipas, blindar los programas sociales dio buen resultado, no alcanzó pero si permeó en la votación final, esperemos la oposición aprenda de esto.
Nadie es invencible, pero si la alianza sigue siendo insuficiente en su liderazgo y poco ortodoxa en sus decisiones, se tendrá que conformar con ser espectador en la segunda fila, porque sus posibilidades estarán fuera de competencia en el 2024. Comprobado está que ser insumiso trae consecuencia en un gobierno vengativo e impositivo, pero también deja buenos dividendos en una elección competida, como Durango y Aguascalientes, en este sentido Tamaulipas, fue la batalla mejor de la alianza, con todo en contra, pudo cerrar la brecha y tener un resultado único en la egofonía de la 4T.
El 2024, está muy cerca, las fichas se acomodan, sin embargo la percusión y el fuego amigo serán parte de esta batalla. Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Pero mire lo que pasa arriba, pasa abajo, esa misma persecución de los insumisos, se da también en los municipios de Tamaulipas, Carmen Lilia Canturosas, alcaldesa de Nuevo Laredo, desde su llegada a la alcaldía de la ciudad, no ha dejado de ser hostigada por la fiscalía tamaulipeca, su delito no ser sumisa.
Esto también pasa en Reynosa, desde que el actual edil, brinco a ser candidato de Morena, porque en el PAN, no le dieron la oportunidad, de competir en ninguna posición, el coraje aumento y la persecución no se hizo esperar.
El actual alcalde de Reynosa Carlos Peña, propinó la tercera derrota por la alcaldía a Chuma Moreno, que dicho sea de paso, ningún alfil del gobernador, pudo llegar a ser alcalde de Reynosa, porque Gerardo Peña, también perdió en contra de Oscar Luebbert Gutiérrez, y su hermano Ismael García Cabeza de Vaca, perdió la diputación federal, enfrentando a María Esther Camargo, esposa de OLG, y la senaduría en contra de Américo Villarreal, y Pilar Gómez, la prima, perdió recientemente la alcaldía de Victoria, con esos números el veremos qué pasa en los próximos meses.
Por lo pronto, el edil reynosense cuida sus andar y decir, la persecución política no cesa y a 60 días de entregar el poder, parece ser que esta no cesará.
P.D. le comento que la oficina de comercio exterior de Tamaulipas, está haciendo su agosto en la “Y” de San Fernando, con los transmigrantes y paisanos que viene de vacaciones, nadie se escapa. Esperemos que Gerardo Peña, ponga orden.