Por: Chano Rangel
La vida puede jugarte bromas, acciones y cambiar tus planes, nada es perpetuo y todo es cambiante, hasta en la política, de hecho, la política es la más cambiante, y su entorno dependerá siempre de momentos y circunstancias.
La repentina enfermedad de López Obrador puso contra las cuerdas a un gran número de su círculo cercano, no por miedo o temor de su salud, si no por la fragilidad que muestran al faltar el máximo líder de la 4T; muchos de los asesores, secretarios, directores y líderes del partido dependen única y exclusivamente de la voluntad del mandatario, les llaman los radicales.
El gran nerviosismo del grupo cercano del presidente se quedó corto, con un cuento de imaginaciones perversas, desde Adán Augusto, pasando por Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y el mismo Ricardo Monreal, fueron presa de la incertidumbre, no es lo mismo una secesión y elección con AMLO, como coordinador de campaña que sin este.
Las especulaciones en ningún punto son sanas, ya sea adentro o afuera del poder presidencial, ni en las mismas familias, son bienvenidas, así es que en ese contexto las circunstancias han cambiado a partir de esta semana, y la sucesión presidencial, puede ser también un momento circunstancial, que puede favorecer a otro personaje fuera del radar de Palacio Nacional.
En este contexto los partidos también se preparan, con la salud mermada del presidente, su semblante así lo delataba en el video enviado a sus seguidores, las cosas ya no pueden ser iguales, los médicos le recomendaron bajar su ritmo de trabajo al mínimo, sin sobresaltos y cero esfuerzos físicos, para poder llegar a buen puerto lo que resta del mandato.
Con todos estos momentos difíciles en torno al mandatario, también no falta los zopilotes que rondan Palacio Nacional, aquellos que se alimentan de carroña, ya están viendo la hora del festín, claro está que en esta ocasión sus premoniciones no fueron asertivas.
Para este momento, las corcholatas están inquietas, la salud del presidente no es la mejor, sus deseos de conducir la elección de sucesor son también parte del itinerario político del mandatario, si la decisión aún no estaba tomada, entonces los parámetros pueden ser otros, a la hora de tomar una decisión final.
La posibilidad de llegar a septiembre, ya con una candidatura definida dentro de Morena, parece ser un hecho tangible, porque de esperar la galvanización y la polarización llegara al interior de Morena; ocasionando implosiones de los grupos antagónicos.
Si el mandatario quiere ser el artífice de una sucesión adelantada, esta tendrá que tomar las medidas en los próximos días, con un mandatario débil en su salud y con poca actividad física, las condiciones cambian diametralmente; y quien encabece esta apuesta, tendrá que entrar al ruedo en las próximas semanas, no hay tiempo, el agotamiento del mandatario es evidente, y en eso también va en juego la elección de su sucesor, dentro de Morena, aunque la elección del 2024, aún está lejana, los tiempos se achican, y no hay peor tiempo que el perdido.
Los tiempos cambian, los momentos y circunstancias mueven todo un andamiaje previsto de manera acelerada, no hay más tiempo, en corto plazo, se tendrá que definir quien encabece al morenismo en el 2024, lo cierto es que, con seguridad, no habrá novedad en el nombre.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Dentro de las apuestas del 2024, en Tamaulipas se mueven varias fichas, la primera que ya empezó aparecer es César Augusto Verástegui Ostos, el Truko, que ha tomado la batuta de ser el panista mejor posicionado y por mucho en el ámbito del electorado estatal.
Desde ese punto, se espera que busque la senaduría en el 2024, por la Alianza o de manera única partidista dependiendo el momento político de los próximos meses.
También se mueven en este sentido Américo Villarreal Santiago, que podría ser colocado como aspirante a diputado federal o ir en busca del senado de la república, sus grupos de apoyo a través de Avanza, ya se han extendido por toda la entidad.
Otro que también aspira és Luis Lauro Reyes, delegado de programas federal de bienestar, que buscaría ser diputado federal, y poder estar listo para la siguiente elección estatal.
De las damas que pudieran ocupar un espacio, sin lugar a duda, la más reconocida es la ex alcaldesa de Reynosa Maki Ortiz Domínguez, que ya se ha colocado cerca de Claudia Sheinbaum y de actores morenistas de primera línea.
El trabajo de Maki Ortiz es indiscutible, y sus aspiraciones la colocan como la carta fuerte de Morena, para el senado de la república.
