- !El beso de Luisa Alcalde, te cambio!!!.
Por Jaime Aguirre
Reynosa Tamaulipas.– ! Como llegaste, Arnulfo, pues claro que con el apoyo del magisterio y a pesar de la gente del Gobernador del Estado, Américo Villarreal Anaya; gran parte de los maestros votaron por tu proyecto «Creyeron en ti «; les dijiste después, vamos a un «paro de labores» y te apoyaron; y de que sirvió: «Te rajaste».
No es fácil sostener un liderazgo y si eres de rancho, menos y digo esto, no porque sea malo ser de rancho, al contrario, es un orgullo y además tú sé lo restregaste al Gobernador él día que fue a decirles a los maestros que estaba abierto al diálogo, lo quisiste ningunear y lo toqueteaste, le dijiste: yo soy de rancho, te sentiste «Chingón «.
Hoy no eres más que una «Piltrafa, un ser pusilánime, despreciado y aborrecido por un sector de la sociedad que lo único que merece es respeto. El magisterio es la columna vertebral de nuestra cultura, es nuestra esencia y son quienes pensaron que tú movimiento era real; Triste Realidad.
?Que te dijo Luisa Alcalde? Te dió un beso y te apantayaste o te asustaste, o las dos cosas, demostraste falta de tamaño, pero no por ser de «Rancho»; porque eso es y debe ser un orgullo; fue porque sólo pensaste en ti y tus beneficios; aunque no creo que hayas logrado ni eso.
Sostener un liderazgo en estos tiempos, es complicado, tú lo habías logrado, sé te fue de las manos, hoy no eres más que un ser sin palabra y sin hu..s.