Por: Chano Rangel
han pasado tres semanas desde que Claudia Sheinbaum tomo el mando del poder, pero ya se repiten los mismos vicios que el anterior gobierno; al poner en tela de juicio a jueces y magistrados, acusarlos públicamente de ser parte del entramado para dejar en libertad a delincuentes y políticos corruptos.
¡por otra parte la misma presidente, les pidió participar en el proceso! Después de exhibirlos y decirles que son corruptos, con los medios nacionales a su disposición y con el uso de recursos públicos para denostar a los impartidores de justicia, y es la misma que asegura habrá piso parejo.
Sin embargo en este proceso no entran los cuestionamientos a ministerios públicos, que son los que aportan las pruebas y los argumentos para que un juez pueda emitir su sentencia o veredicto, con carpetas de investigación incompletas, violaciones al debido proceso, con testigos falsos, con testimonios a medias, poco o nada puede hacer un juez para sentenciar a un delincuente, que al final quedara libre, no por culpa del juez o magistrado, si no por falta de pruebas que un Ministerio Publico, no supo recabar y hacer su labor principal, la investigación oportuna y responsable.
Pero los ministerios públicos, no dependen del poder judicial, son servidores públicos dependientes del estado, de la federación y ocupan un lugar privilegiado en la impartición de la justicia, sin embargo durante el sexenio anterior, estos mismos, recabadores de pruebas, no supieron integrar una carpeta de investigación, y algunas apócrifas, como la proporcionada por la UIF de Santiago Nieto, en contra del ex gobernador Cabeza de Vaca; y con esto tampoco aseguro o digo, que el ex sea un santo, aclarando amanece.
Lo hecho en la manera por Rosa Icela Rodríguez, secretaria de gobernación impuesta por AMLO, a Claudia, es lamentable, vergonzoso en un país donde se presume un estado de derecho, donde se invita a los jueces y magistrados a participar en las urnas, pero con toda la caballería del gobierno de la república encima, para denostarlos y exhibirlos como corruptos ¿Cuál piso parejo?
Los actuales jueces y magistrados no tienen una estructura electoral para ganar una contienda, sin duda los que operarán la elección de estos servidores e impartidores de justicia serán los partidos políticos, y ahí la mano la lleva Morena, quien cuenta con los mayores operadores y votos a través de los apoyos sociales.
Al llevarse las elecciones acabo, salen varias preguntas ¿respetara el gobierno de Sheinbaum, si pierda la mayoría de la Corte? ¿aceptara la presidente los resultados de jueces y magistrados en las urnas, si estos no le son favorables?
Sin duda, creo que no, el líder del congreso quiso que su hija ganara la delegación Cuauhtémoc a la mala, y le quiso quitar el legítimo triunfo a Alejandra de la Vega, que al final el tribunal definió a su favor, como en la prehistoria política, cuando no gana arrebata. Y el enojo del diputado ahora es de magnanimidad, y en sus palabras le perdono la vida a la jueza que resolvió anular lo publicación en el diario oficial, la reforma judicial, a la que la presidenta hizo caso omiso.
Una vez electos jueces y magistrados, entonces si se cumplirá los veredictos, o serán como hasta hoy los emitidos por la corte, que son ignorados por diputados y senadores, incluso por la misma mandataria. Por el bien de México, esperemos que no.
La aniquilación de la Corte comienza en Palacio Nacional, con órdenes a las cámaras legislativas, que se han convertido, como en la época del viejo PRI, en lacayos del ejecutivo.
Con todo el poder de ser presidente, y las atribuciones que la ley otorga, recursos y medios de comunicación a disposición, la orden fue clara, acaben con la Corte, y desde este punto, hemos visto como el Senado y la Cámara de Diputados, hacen todo, hasta lo imposible para ganarse los favores de la ejecutiva, no vaya a ser que, en la próxima elección de gobernadores y alcaldes, no alcancen nada, mejor portarse bien con la presidente, en política todo tiene un costo, como en la vida misma, cual será esta reforma, tardaremos unos años, para ver sus resultados, pero será en este sexenio.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
De acuerdo con los últimos números de generación de empleos, la ciudad de Reynosa genera el 60% de las vacantes ofertadas por Tamaulipas, después de ahí matamoros y Nuevo Laredo, ocupan los lugares subsecuentes.
Para esto desde hace 8 años, y dando seguimiento a esta política; en el ayuntamiento de Reynosa, que dirige Carlos Peña Ortiz, se hace la tarea para que sea atrayente de nuevas inversiones, tanto nacionales como extranjeras.
Reynosa, es en este momento el bastión popular de votos, pero también el conglomerado que da a Tamaulipas, más empleos y una competitividad de primer nivel.
Las políticas públicas sanas, que mantiene el edil Peña Ortiz, generan confianza y certidumbre, dan opciones de crecimiento a muchas familias y para los jóvenes existe un campo de oportunidades única, en empleo y desarrollo académico.
Reynosa, seguirá siendo el aportante de recursos y empleos, de votos no se discute, 151 mil en la última elección, con estos argumentos, indiscutiblemente la política de la entidad deberá tener los ojos puestos en la ciudad fronteriza.