Por Pegaso
Ahora resulta que El Trompas es todo un garañón.
Y es que andaba yo volando allá, cerca de la estratósfera, gozando del límpido y caluroso cielo primaveral de Reynosa, preparándome para tomar unas merecidas vacaciones en algún paraíso tropical, como La Playita, el Parque Cultural o ya de perdido la orilla del río Bravo.
Después me vine a mi búnker para revisar las más morrocotudas y chimenguüenchonas noticias de la red y llevar a mis dos o tres lectores los picantes comentarios al estilo Pegaso.
Algo que ya está en boca de todos es el escándalo sexual que estalló la semana pasada, donde una actriz porno pretende relatar el encuentro íntimo que tuvo con el ahora hombre más poderoso del planeta.
Se acostumbra en gringolandia que los hombres públicos y de poder hagan firmar un contrato de confidencialidad con las personas con las cuales mantienen intimidad. En este caso, la actriz porno Stormy Daniels tuvo que estampar su rúbrica en un documento que le presentó El Trompas antes de cuchiplanchar.
Lo malo fue que la chamacona se presentó a demandar en una corte porque dice que nunca firmó el papelito que la comprometía a guardar silencio. Es más, ya estaba decidida a ir a un medio de comunicación amarillista, de los miles que abundan en ese país, cuando unos guaruras le salieron en el estacionamiento para amenazarla a ella y a su hija si decía algo en contra de El Trompas.
Por el trabajito, la fémina recibió una pizcachita, 130 mil dólares, pero ahora quiere bajarle un buen billete al pasquín que comprará su historia para publicarla en la portada.
Pero, ¿quién es Stormy Daniels?
En primer lugar, es necesario saber que en gringolandia las actrices porno gozan de tanta reputación como las de Hollywood. Tienen familia, tienen hijos, cuentan con lujosas mansiones y llevan una vida como la de cualquier otro ciudadano, a pesar de la actividad que desempeñan.
Stephany Gregory Clifford, conocida profesionalmente como Stormy Daniels, Stormy Waters o simplemente Stormy, es una actriz, guionista y directora pornográfica estadounidense.
Nació el 17 de marzo en Baton Rouge, Luisiana y su pareja actual es Glendon Craine.
Stormy ha sido galardonada en repetidas ocasiones. Por ejemplo, fue la Penthouse Pet of the Month y recibió el AVN Award Bes Screenplay, entre otras preseas (Nota de la Redacción: Nomás le falta ganar El Pegaso de Oro).
Su reputación, su rubia cabellera, su hermosa sonrisa y sus ebúrneas protuberancias encendieron la flama de la pasión del entonces magnate hotelero y ahora Presidente gringo.
Un brinquito que puede costarle muy caro, tal vez más que la aventurilla que tuvo el también inquilino de la Casa Blanca, Vil Clinton con su becaria Mónica Lengüiski.
Quédense con el refrán estilo Pegaso que dice: «Cuenta con mayor capacidad de tracción el tejido capilar de una hembra de Homo sapiens en relación con un arado tirado por un par de bovinos añosos». (Jala más el pelo de una mujer que una yunta de bueyes).