Por Pegaso
Acá, desde ni nubecilla viajera, acuso recibo de dos oficios de extrañamiento sobre contenido vertido en esta columna durante las últimas dos semanas.
Ambos ocursos se refieren a las constantes opiniones de un servidor en torno a la diáspora de migrantes hondureños y guatemaltecos que pretenden llegar a la frontera de México con Estados Unidos y en su caso, transponer la línea limítrofe para obtener la estadía legal y alcanzar el largamente anhelado «sueño americano».
El primero viene firmado por un alto funcionario de la CÍA.
Pretenden que les diga cómo obtuve los datos altamente clasificados sobre la presunta autoría de esa agencia en la organización, logística y manutención de las caravanas de centroamericanos con fines netamente políticos, a saber, que el Presidente de su país, el Trompas, quiere subir su popularidad metiendo miedo a los ciudadanos mediante un plan perfectamente bien orquestado.
Si sube su popularidad, ganará más escaños en el Congreso y así podrá hacer lo que se le dé la gana desde el Gobierno.
Dicen que ni la KGB, ni la Interpol, ni la Inteligencia Israelí, ni Tom Cruise cuentan con tal información.
Más adelante tratan de negar su intervención mediante un argumento que a mí me parece infantil: «Dear Pegasus: For this way we make of your knowless what your publications writed in your column are wrong, because our little guys of the CÍA are very much serius and never break the laws of the other countries». (Traducción libre: Estimado Pegaso. Por medio de la presente hacemos de tu conocimiento que las publicaciones vertidas en tu columna son erróneas, ya que nuestros muchachitos de la CÍA son muy bien portaditos y siempre han respetado el marco legal de los demás países».
Por último, tratando de desviar mi atención, aventuran algunas hipótesis en torno a la autoría de la supradicha movilización de migrantes:
1.- El Chapo Guzmán. Presumen que es El Chapo Guzmán el que pagó para que miles de personas dejaran sus países de origen e intentaran cruzar a Estados Unidos. El móvil sería la venganza por tenerlo preso en una cárcel de Nueva York.
2.- El Peje. Con la lana que su Gobierno se ahorrará al cancelar el Nuevo Aeropuerto (NAIM) les dará un empleo temporal en la zona fronteriza que consistirá en apedrear y sacarles la lengua a los agentes de Migración y del CBP.
3.- Los OVNIS. Hay evidencia de que los ovnis se adueñaron de la voluntad de toda esa gente para lanzarlos a una peligrosa aventura. El Coordinador de las caravanas es en realidad Jaime Maussán.
El segundo oficio viene de los estudios que producen la serie de dibujos animados Los Simpsons.
Me dicen que no la chingue, que ya les quemé tres capítulos proféticos de su gustado programa relacionados con las caravanas.
Aseguran que en uno de esos capítulos los personajes de Los Simpsons se convierten en agentes de la CÍA y se infiltran entre las masas de guatemaltecos y hondureños para convencerlos de que vayan a Estados Unidos.
Homero, Marge, Bart, Lisa y Krusty llegan a Honduras para cumplir con la orden ejecutiva de su Gobierno, que es amenazar con una invasión de feos, panzones y prietos migrantes e inducir el voto a favor de otro de sus personajes, el Trompas.
El capítulo que tuvo que ser descartado, sería después confirmado por las redes sociales como una verdadera profecía, donde una de las escenas sería igualita a otra que ocurriría más tarde en el mundo real.
Estoy a la espera de las cartas que también me hagan llegar Walter Mercado, el Brujo Mayor, Jaime Maussán y los seguidores de Nostradamus, porque les estoy quitando la chamba.
Concluyo mi aportación de hoy con la frase estilo Pegaso, cortesía de Mauricio Garcés: «¡¿Oriza sativaaaaa?!» (¡¿Arrrrroooooozzzzzz?!).