Por Pegaso
Hace muchos años, en una galaxia muy, muy lejana…..¡Pam, pam, pam, paaam, pam, paaammm, pam…! ¡Pam, pam, pam, pam, paaaam, pam, pa, pa, pa, paaaaaammmm!
El Emperador Palpejine ha puesto en jaque a los rebeldes, lanzando un poderoso ataque gracias al control que tiene del Senado.
Con la mayoría de los representantes de la Galaxia a su favor, ha pedido el desafuero del comandante jodi Obi wan Cabezobi.
Gracias a las fuerzas que tiene dispersas por todos los planetas, llevó sus enormes naves cruceros para cercar cualquier intento de escape.
Mientras tanto, en el cuartel general de los rebeldes, Obi wan Cabezobi planea como escapar del cerco tendido por el Emperador.
Con el uso de La Juerza, wan Cabezobi, el último Jodi busca la manera de filtrarse entre las naves enemigas, para llegar hasta la sede del Senado, el planeta Defeine y arrebatar el poder a Palpejine.
-Obi wan Cabezobi: Citrukipio, reúne las fuerzas rebeldes. Vamos a intentar cruzar la barrera de los cruceros enemigos. El emperador no se espera esta respuesta.
-Citrukipio: Ven, Parturito. Vamos a dar aviso a la flota.
-Parturito: ¡Pi, piii, pi, pi, piuuuu!
-Citrukipio: ¡Calla! No digas majaderías y cumple con las órdenes del comandante.
Mientras se preparan las naves, en el crucero principal el Emperador Palpejine y su aliado, Dark Monrevader planean el ataque.
-Dark Monrevader: ¡Es ahora, mi Emperador! Debemos asestar el golpe definitivo. El Senado ya está preparado para emitir la orden. Debemos empezar cuanto antes el fuego y destruir todo el planeta para acabar con el movimiento rebelde.
-Palpejine: No, mira. Vamoj a ejperarnoj un poquito máj. Yo no joy el que ordena ejte ataque, jino el Jenado.
-Dark Monrevader: Pero, señor, si no atacamos ahora y lo dejamos vivir, se va a fortalecer y va a buscar el control de la República.
-Palpejine: Ejo hay que dejárjelo al Jenado. Elloj actuarán de acuerdo con la ley de la Galaxia que yo mijmo elaboré.
El titubeo del Emperador ha servido para que los rebeldes se organicen. No sabe el alacrán que se ha echado al seno. Mientras tanto, preparan su arma principal, la Estrella de la Calaca para enviar una dosis letal de rayos hasta la base rebelde.
-Obi wan Cabezobi: ¡Es el momento! Siento el poder de La Juerza.
Momentos antes de que el rayo de la Estrella de la Calaca dé en el blanco, los rebeldes logran salir a la velocidad de la luz a bordo de la Hurraca Milenaria, una de las naves más veloces de la Galaxia.
Al mismo tiempo, en el planeta Defeine la Senadora Amígdala convoca a sesión extraordinaria. Llega el Comandante wan Cabezobi, blandiendo su espada láser. Aunque encuentra resistencia por parte de los soldados de Pejetine, finalmente logran llegar a la sede del Senado, desde donde toman el control de la Galaxia.
Ahora, el Jodai y sus aliados esperan la orden del Senado para iniciar la persecución del necio ex Emperador.
-Obi wan Cabezobi: ¡Ñaca, ñaca, ñacaaaa! La venganza es dulce. ¡Tráiganme a Pejetine y Dark Monrevader para hacerles manita de puerco, luego le haremos cosquillas en los pies y lo pondremos a ver churronovelas!
-Citrukipio: Pero, señor, ¡qué castigos tan terribles les has preparado! Siento lástima por ellos.
Luego de restablecer la República, wan Cabezobi llega al salón donde el ex Emperador solía tener el control de la galaxia, se sienta en la silla y dice para sí mismo, mientras la cámara hace una última toma con un alejamiento lento, mientras se escucha la tenebrosa Cumbia Imperial…
-Obi wan Cabezobi: Me queda muy bien. Qué se me hace que también me nombro Emperador.
Ojo, mucho ojo: Los personajes y situaciones descritas en este relato son ficticias y no tienen relación alguna con la vida real. Aliméntate sanamente. Come frutas y verduras.