Por Jesús Rivera
¡Al fin! El Presidente Peña Nieto viene a inaugurar el Libramiento Sur II de Reynosa.
Hasta la hora de redactar esta colaboración no se había cancelado la visita del mandatario, así es que supongo que aquí estará aquí este jueves para cortar el listón inaugural de esa autopista de cuota.
Volando yo por aquellos rumbos me puse a pensar que si durante la noche o la mañana se sueltan los diablos, nos avisarán de último momento que el aún inquilino de Los Pinos volvió a batear de faul.
Allá por el mes de enero de este año se anunció que Peña estaría en Reynosa para hacer la inauguración.
Horas antes del evento se armó un San Quintín entre los grupos de la delincuencia organizada que se siguen disputando la plaza y entonces el Estado Mayor Presidencial decidió posponerlo.
«Tuvo miedo Peña Nieto», fue uno de tantos encabezados que leí al día siguiente.
Esperando que no se repita la misma situación, este día estaremos esperando el arribo del titular del Ejecutivo Federal.
Nos han citado a las 11:00 horas en el estacionamiento del auditorio municipal «Ramón Pérez García», donde se entregarán las acreditaciones.
De ahí nos llevarán en autobús hasta un primer filtro, cerca del entronque del Libramiento Sur II con la carretera a Monterrey, y luego a un segundo retén, hasta llegar a un gigantesco enlonado, donde nos harán esperar por más de una hora, como ha ocurrido en anteriores ocasiones.
Se supone que el evento empezará a la una de la tarde, pero si bien nos va, espero que a las dos o dos y media esté Peña Nieto dando su mensaje y cortando el listón.
Arribará en helicóptero. En un radio de por lo menos cinco kilómetros habrá vigilancia del Estado Mayor Presidencial, del Ejército y de la Policía Federal, todos armados hasta los dientes.
Después de tanto derroche de recursos económicos y de horas hombre, el Presidente abordará de nuevo su helicóptero y todos abandonaremos del lugar con la sensación de que lo que ahí se hizo no sirvió de nada, porque el libramiento ya estaba en funcionamiento desde hace mucho y además, es de cuota, así que los únicos que ganan son los concesionarios.
En fin. Es la última visita de Peña Nieto a Reynosa como mandatario y me supongo, será la última rechifla que los sufridos habitantes de este terruño le podrán dedicar.
Por lo pronto, nos quedamos con el refrán estilo Pegaso que dice: «No existe fruto del arbusto del género Capsicum annuum que les calce». (A ustedes no hay chile que les embone).