Por Pegaso
Amigos míos, hoy estará en Reynosa el único, el aclamado, el siempre imitado pero jamás igualado Perro Pantorrillero.
Alejando Rosas Díez-Durón, el archifamoso Perro Pantorrillero, vendrá a ladrar… perdón, a darnos una cátedra de su sapiencia política a los rústicos, rupestres y arcaicos periodistas de Reynosa.
El mote le viene desde hace aproximadamente dos años, cuando su amo… perdón, su jefe político, Rucardo Montreal, se agarró de la greña con la entonces Presidenta de MORONA, Yaidckol Chilinsky.
Ésta, al resentir los molestos gruñidos del pequeño cuadrúpedo, le encajó el epíteto que ya todos conocemos.
Perros hay que cumplen diferentes funciones, y aquí les daré algunos ejemplos:
-Perro de caza: Es aquel que se utiliza para cobrar alguna presa cuando vamos de cacería. A veces se hace difícil entrarle a algún pantano o tupido bosque, y ahí es donde entra nuestro fiel chucho para recuperar el pingüe botín. Como Rogelio Ramírez, el Secretario de Hacienda.
-Perro faldero: Muy emparentado con el pantorrillero. De hecho, creo que es el mismo, solo que en lugar de andar en los chamorros, se sienta en las faldas de su patrón y este le avienta alguna croqueta de vez en cuando.
-Perro de guerra: No hace falta una descripción más detallada. Son aquellos mastines que sirven para amedrentar a las tropas enemigas, como mi general Chencho Sandoval, Secretario de la Defensa Nacional.
-Perro minitoy. Pequeños ejemplares que no miden más de veinte centímetros, que tienen la cabeza más grande que el resto del cuerpo, por eso caben en un bolsillo de dama. Ejemplo: Cualquiera de los enanos asesores de la Presidencia de la República.
-Perro lazarillo: Guía a las personas ciegas. Esta es otra raza muy común entre los asesores del Pejidente ALMO.
-Perro de pelea: Son usados en combates con otros canes callejeros. Son muy comunes en los arrabales, donde suelen ocurrir ese tipo de enfrentamientos. El ejemplo más claro de perro de pelea es el ínclito, nonplusultra y pluscuamperfecto diputado federal Frenández Norroña.
-Perro de compañía: Como su nombre lo dice, son ejemplares muy bien acicalados cuyo único propósito es acompañar a sus propietarios. Aquí hay varias razas, como la french poodle, el chihuahua o el chow chow, o como el carnal Marcelo Ebrán, que le sirve muy bien al Jechu (apócope de Jefecito Chulo) como caniche de compañía.
-Perro de exhibición: Postulados para algún gran evento donde pueden llevarse el premio principal. Ahora conocidos como “las corcholatas”. Están a la vista de todos los mexicanos para que seamos nosotros los que los escojamos. Claro, siempre y cuando estén en la lista que “destapó” el Pejidente hace unos días. Algunos de los más conocidos: Claudia Shikitibum, el carnal Marcelo Ebrán, Juan Román De la Frente y Estaban Montezuma.
No sé qué vaya a ladrar…(otra vez perdón), a decir El Perro Pantorrilero el día de hoy.
La última vez que estuvo en Reynosa fue durante un acto político de cierre de campaña, y ahí prometió que soltaría una bomba que a involucraría a altos directivos de la UAT y del Gobierno del Estado.
Pero todo resultó en un pequeño cuetito chiflador, porque la tal “Chulada” sigue libre y el Gobernador continúa haciendo giras de trabajo por todo el Estado sin siquiera despeinarse.
Por eso los dejo aquí con el refrán estilo Pegaso que a la letra dice: “Se percibe el sonido gutural de los cánidos, Sancho, lo cual significa que nos trasladamos”. (Se escuchan los perros, Sancho, eso quiere decir que avanzamos).
