- Al arribar a Rusia, la Selección alemana estará recluida en Vatútinki, un lugar austero y rodeado de bosques
Moscú, Rusia.- El avión de la Mannschaft aterrizó en el aeropuerto de Vnúkovo, en el sur de la capital rusa. Los alemanes estarán listos para disputar su primer partido en el Grupo F el domingo en Moscú contra México, antes de enfrentarse a Suecia (23 de junio) y a Corea del Sur (27 de junio).
La elección de la casa de la Mannschaft durante el Mundial ha generado debate: Vatútinki es una localidad sin grandes atractivos y los jugadores estarán recluidos en un lugar rodeado de altos muros de hormigón. A su alrededor tendrán un bosque y un pueblo de 10.000 habitantes, con edificios muy modestos y a menudo necesitados de una renovación.
Teniendo en cuenta la lejanía de dos ciudades de sus partidos de la primera fase (Sochi y Kazán) y de la probabilidad de volver a jugar en Moscú en caso de clasificación, el cuerpo técnico optó por instalarse cerca de la capital, relativamente central en la red de estadios del Mundial.
Junto con los jugadores y los entrenadores los alemanes llegan con dos cocineros, cuatro médicos, cuatro fisioterapeutas, analistas, preparadores físicos y un equipo dedicado a las relaciones con la prensa y la logística.
Alemania llegó ocho veces a la final del Mundial en las dieciséis últimas ediciones, desde 1954, y tiene cuatro títulos mundiales.
La preparación del equipo germano para esta Copa del Mundo ha sido algo caótica, con una única victoria en seis partidos, frente a Arabia Saudí (2-1), dos derrotas, una de ellas el 2 de junio contra Austria (2-1), y tres empates.
El seleccionador Joachim Löw avisó del alto nivel de los competidores: «Tendremos grandes rivales. España ha mejorado y Brasil y Argentina están bien también».