- Las viviendas ubicadas en la trayectoria de un túnel que quedó en proceso de construcción serán inspeccionadas ante el surgimiento de un enorme socavón
Ciudad de México.- Las viviendas ubicadas en la trayectoria de un túnel que quedó en proceso de construcción, desde una vivienda que se presume sirvió en el pasado de casa de seguridad en la colonia Juntas de Humaya, de Culiacán, Sinaloa, serán inspeccionadas ante el surgimiento de un enorme socavón, a fin de evitar que haya desplome de edificaciones.
Personal de la Secretaría de Obras Públicas del Gobierno del Estado verifica las construcciones que se encuentran sobre la calle 18 de febrero, en virtud que se observa que en algunas bardas presentan fisuras y en la madrugada del martes pasado, en la sala de una de las casas se formó un socavón de más de dos metros de diámetro.
José Luis Zavala Cabanillas, titular de la dependencia estatal, dijo que antes de rellenar el enorme túnel que se construyó, con el apuntalamiento con madera, la cual se está pudriendo, se corre el riesgo de posibles colapsos de edificaciones, por eso necesario conocer toda su trayectoria.
Dio a conocer que lo instruyó el gobernador del estado, dar solución inmediata a este problema, que se presentó en una vivienda, donde se formó un socavón que tiene más de dos metros de profundidad, por donde cayó un joven que dormía en la sala.
Vivienda había sido cateada y asegurada
La versión de los vecinos de la calle 18 de febrero, entre las calles Cebolla y Lechuga, es que hace más de 11 años, una vivienda que permanece abandonada fue cateada y asegurada por el Ejército, así quedó al descubierto que contaba con un túnel de escape de presuntos miembros de la delincuencia.
En la edificación del túnel, las excavaciones fueron apuntaladas con madera, por lo que con el paso del tiempo y las lluvias los puntales comenzaron a ceder y en varios puntos de dicha calle se han abierto pequeños socavones y algunas viviendas presentan cuarteaduras en sus bardas.
La madrugada del pasado martes un fuerte estruendo despertó a varias familias de la calle 18 de febrero, en una de ellas descubrieron que el joven Martín «N», de 25 años, quien dormía en un sillón en la sala, desapareció al desplomarse el piso.
Su familia, que acudió a ver lo que sucedía, tuvo dificultades para poderlo sacar del socavón que se abrió con más de dos metros de profundidad, por lo que este sufrió de golpes en varias partes del cuerpo por la caída.
