- Con el cambio de régimen eliminará el Estado Mexicano de Facto.
- No más sometimiento del poder político al poder económico.
- El Caso del Gral. Cienfuegos se suma al de otros 11 Generales.
Por: Abraham Mohamed
mohacan@prodigy.net.mx
Nada de lo que ocurra en el sórdido mundo de la narcopolítica nos debe causar sorpresa, porque todo es posible, y menos en éste cambio de régimen que realiza el actual Presidente López Obrador con su Cuarta Transformación, que dice será “para reordenar al país combatiendo la corrupción y la impunidad en beneficio de todos.”
Bueno, te adelantaré que el caso del señor General de División DEM, Salvador Cienfuegos Zepeda, ex titular de la Secretaría de la Defensa Nacional en el gobierno de Peña Nieto y quien fue aprehendido en Estados Unidos acusado de narco y de lavado de dinero, aquí en México tendrá las consecuencias y la trascendencia que más le convengan al señor Presidente. Con esto te quiero decir que según sean las “resistencias” que le presenten sus adversarios, ya él decidirá cómo proceder para mediatizarlos.
El cambio de régimen que pretende AMLO tiene la intención de eliminar el añejo “Estado Mexicano de Facto” que surgió en 1929 al conformar el presidente Calles, el Partido Nacional Revolucionario (PNR) ancestro del PRI.
Está confirmado que desde aquella época el poder político quedó sometido a los intereses de otras “fuerzas”, principalmente al dominio del poder económico, y también al militar, al clerical y al de la burocracia.
Y así se mantuvieron por años los cúpulos de tales “fuerzas” aprovechándose del “cuerno de la abundancia” hasta que Miguel de la Madrid aprobó el neoliberalismo. El país se sacudió al incrementarse en forma bárbara el saqueo, luego al privatizarse los recursos de la nación con Salinas aumentó la desigualdad, la pobreza extrema y la delincuencia organizada con lo que se desató la corrupción y la impunidad agravándose en los siguientes gobiernos priistas, sumándose como nuevas fuerzas de pode, el narco y los medios masivos de comunicación, por lo que el hartazgo hizo que los mexicanos votaran por un cambio eligiendo presidentes del 2000 al 2012 a los panistas Fox y Calderón que empeoraron la situación del país, por lo que el PRI recuperó la Presidencia con Peña Nieto que casi acaba con los restos del patrimonio nacional.
Por eso los mexicanos nuevamente hartos de los gobernantes rateros, votaron por López Obrador en el 2018 para que, “con los de abajo” ya como Presidente, cambiara el régimen de gobierno y en eso está.
“No más sometimiento del poder político al poder económico”, es su propósito y ya se nota por el resquebrajamiento del Estado de Facto al debilitar a la clase empresarial agrupada en el CCE, COPARMEX, CANACINTRA, etc. y solo mantiene cerca a los más poderosos “barones del dinero” integrados en el Consejo Empresarial Presidencial que son con los que concierta los planes de desarrollo nacional.
AMLO ya también debilitó a la burocracia (FSTSE), a la mayoría de los medios masivos de comunicación Impresos, Radio y TV y a los periodistas nos trae por la calle de la amargura y ahora va contra quienes se quedaron enquistados en las estructuras de su gobierno, incluidos por supuesto, algunos militares.
Hay que recordar que AMLO dijo: “Si por mí fuera, desaparecería al Ejército y lo convertiría en Guardia Nacional.”
Tal vez por eso, pienso que la detención del señor General Cienfuegos hace recordar la lista de 12 Generales que de 1997 a la fecha han sido detenidos por tener nexos con el narco.
Algunos de ellos, hay que decirlo, fueron absueltos al comprobarse su inocencia.
El descrédito empezó en 1997 cuando el General Jesús Gutiérrez Rebollo el llamado “Zar Anti Drogas”, director del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas (INCD) siendo Presidente Zedillo, fue acusado de darle protección a Amado Carrillo Fuentes “El señor de los cielos” por lo que se le condenó a 40 años de prisión.
Poco después fue detenido el General Alfredo Navarro Lara por intentar sobornar al entonces Delegado de la PGR en Tijuana con un millón de dólares para “dejar trabajar” a los Arellano Félix, según se difundió en los medios. Le dieron 20 años de prisión en 1998.
A Jorge Maldonado Vega, se le acusó también de proteger a los miembros del Cártel de Juárez, pero fue absuelto después de cuatro años de prisión en el penal del Altiplano al no comprobársele los delitos de delincuencia organizada y de contar con recursos de procedencia ilícita.
En el 2000 fueron detenidos los Generales Mario Acosta Chaparro y Francisco Quirós Hermosillo, para ser sentenciados a 16 años 6 meses de cárcel por fomentar al narcotráfico. Al poco tiempo de ser liberado, Acosta Chaparro fue asesinado a tiros en CDMX. Un año después el general Ricardo Martínez Perea sería condenado a 15 años de reclusión por delitos contra la salud.
En el gobierno de Felipe Calderón detuvieron a Juan Manuel Barragán por presuntamente ser cómplice del General Navarro Lara, además de haber recibido sobornos del Cártel de Sinaloa por lo que se le dictaron 15 años de cárcel.
Tomás Ángeles Dauahare, Roberto Dawe González y Rubén Pérez Ramírez fueron detenidos en el 2012 acusados de pasarles información confidencial a los hermanos Beltrán Leyva para evitar su captura. Sin embargo, salieron absueltos de los cargos al comprobarse su inocencia.
Ricardo Escorcia, Comandante de la XXIV Zona Militar, también fue señalado de proteger a los Beltrán Leyva en Morelos. Tras aterrizar un King Air monitoreado por la DEA en el aeropuerto de Cuernavaca, dizque se descubrieron sus nexos con los narcos, pero no hubo acción penal en su contra. Solicitó su baja del Ejército y se perdió en el anonimato.
El último y más importante en rango militar, es el General Salvador Cienfuegos Zepeda, ex titular de la SEDENA que fue detenido en el Aeropuerto de Los Ángeles, California, apenas este pasado 15 de octubre, acusado de nexos con el narcotráfico y de lavado de dinero.
-x-x-x-x
Como si apuntalara mi opinión sobre el cambio de régimen que pretende hacer con su 4T y también como si aprobara la lista que acabo de presentar sobre los Generales involucrados en estos delicados asuntos de la delincuencia organizada, el presidente López Obrador al comentar el caso del General Cienfuegos Zepeda dijo:
“Esto es una muestra inequívoca de la descomposición del régimen, de cómo se fue degradando la función pública, la función gubernamental en el país durante el periodo neoliberal. Yo siempre dije que no era solo una crisis, que era una decadencia lo que se padecía; un proceso de degradación progresiva y estamos ahora constatando la profundidad de esta descomposición que se fue gestando de tiempo atrás”. Además aclaró que no existe ningún tipo de investigación en México en contra del General Cienfuegos Zepeda que tenga que ver con narcotráfico, pero sí dejó en claro que
“todos los que resulten involucrados en este asunto del General Cienfuegos, que estén actuando en la SEDENA, van a ser suspendidos, retirados y si es el caso, puestos a disposición de las autoridades competentes. No vamos nosotros a encubrir a nadie, ya pasó ese tiempo”. Eso dijo.
Por otra parte el Presidente y Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas defendió la labor que realizan y a las cuales calificó como “pilares del Estado mexicano”.
Reiteró estar absolutamente convencido de que las Fuerzas Amadas de México son instituciones, en este caso la SEDENA y la Marina, fundamentales para el desarrollo de nuestro país. Dijo que “son tan fuertes que ni estos asuntos tan lamentables como éste las debilita. No deja de ser lamentable que esto suceda, pero las Fuerzas Armadas de México constituyen una garantía para mantener la paz, la tranquilidad en el país y para la defensa de nuestra soberanía”.
Insisto para terminar: el cambio de régimen va en serio y la extinción del Estado Mexicano de Facto, también.
Creo que todo esto proyecta el perfil de un caudillo.
ADENDUM: En la nueva audiencia de detención que el General Cienfuegos tendrá el próximo martes 20 en la Corte de Los Angeles, Cal. se decidirá si se le otorga fianza para que atienda su problema en libertad o se mantendrá en custodia siendo trasladado a Nueva York para que su proceso se realice en la misma Corte donde se ventiló el Caso del Chapo Guzmán –sentenciado a cadena perpetua- y se lleva el de García Luna porque presuntamente hay vinculación entre ellos.