Por José Gregorio Aguilar
La demanda educativa en la Universidad de Seguridad y Justicia de Tamaulipas creció, en los últimos dos años, en forma significativa ya que en el 2022 un total de 120 alumnos se habían inscrito pero en este año son ya 200 los aspirantes a estudiar alguna de las tres licenciaturas que se ofrecen en esta institución
Al respecto, el rector de la Universidad de Seguridad y Justicia, (USJT) Willy Zúñiga Castillo, hizo un llamado a los jóvenes que estén interesados en ingresar a alguna de las carreras que se imparten, a que acudan a inscribirse cuanto antes en esta etapa de preinscripciones de las tres licenciaturas, Ciencias Policiales, Criminología y Seguridad Pública, ya que la etapa de preinscripciones concluye en julio y el cupo es limitado.
“Les preinscripciones terminan en el mes de julio, llevamos actualmente un promedio de 200, 250 y si, la demanda ha crecido conforme han pasado los años, tenemos una plantilla educativa de 524, casi 550 alumnos en las tres licenciaturas, siendo la licenciatura de Criminología la más ocurrida, en un promedio de 255 alumnos que son los que tenemos en Criminología, los otros dos bloques restantes se dividen con Seguridad Pública y Ciencias Policiales”.
Reiteró a los interesados en ingresar, apurarse para lograr asegurar un lugar, ya que por los espacios el cupo es limitado, pues dijo, no olvidemos que también tenemos público de formación activa, es decir, formación continua para policías y para agentes del ministro público y para peritos.
“Entonces la capacidad de infraestructura de la Universidad es algo limitada y tenemos que estar jugando un poco con los espacios de los salones y las áreas de instrucción en ese número”.
Zúñiga Castillo, comentó al respecto, que han tenido que reorganizar los espacios al interior de la Unidad, “tuvimos por ejemplo 28 salones, muchos de esos en la anterior administración estaban habilitados como oficinas, entonces estamos reorganizando las funciones administrativas para que el personal siga funcionando en otras partes y habilitar los salones para lo que realmente son, espacios de académicos, de instrucción y de formación”.
