Por Enrique Jonguitud
Ciudad Victoria, Tam.-La diputada local, Casandra de Los Santos aseguró que tras visitar el área de la Laguna Madre donde 600 familias corren riesgo por un derrame de hidrocarburo, la contaminación no se ha detenido, por lo que se calcula que la situación lleva más de dos daños ocurriendo.
En entrevista, la legisladora sostuvo que no hay remediación ni atención al problema debido a que Petróleos Mexicanos culpa a una empresa privada y viceversa, en tanto, cinco kilómetros a la redonda del derrame se extinguió toda la fauna.
“El sábado pasado estuve en la comunidad de carboneras para ver expresamente ese tema, hace más de uh mes y medio que se presentó la iniciativa (el exhorto) por esa problemática de la empresa Jaguar y se está solicitando tanto a Petróleos Mexicanos como a la empresa y uno le echa la culpa al otro”.
El 16 de enero diputados de Morena del Congreso del Estado, acusaron a la empresa petrolera «Jaguar E&P» de San Pedro Garza García, de provocar una fuerte contaminación ambiental que afecta la salud de los habitantes y que ha causado mortandad de peces, derivado de sus actividades de exploración y búsqueda de hidrocarburos en las zonas de San Fernando y Soto la Marina.
De Los Santos refirió que en comunidades aledañas estimó habitan al menos 600 familias, que incluyen a La Florida a 3 kilómetros y Lavaderos a 8 kilómetros en San Fernando.
Mientras que Las Enramadas a 7 kilómetros, La Laguna a 4.5 y El Carrizo de Soto la Marina.
Sin embargo el problema cumple más de dos años y el hidrocarburo se sigue fugando, causando daños a la salud de los habitantes que sufren de hemorragias.
Sabemos que es una problemática que se tiene que resolver y la secretaría de salud desplegó un equipo de trabajo para apoyar a los habitantes de Soto la Marina y de San Fernando.
Preciso que el derrame no se ha detenido “lo que se hizo fue como unos canales donde se sigue haciendo la derrama y sigue contaminando la Laguna Madre, si ustedes visitaran esa área se darán cuenta que no hay ninguna hormiga, todo cinco kilómetros a la redonda está muerto todo.