Que bonitos Juniors
Por Roberto Olvera Pérez
En este proceso de selección de candidatos, sobre todo de alcaldes, donde la permanencia de la Cuarta Transformación va quedando en entre dicho por los diferentes municipios de la entidad y donde se escucha el descontento de los que algún día creyeron sin dar nada cambio en la fortaleza del Obradorismo y en Villa de Croix hoy Casas, no es la excepción, pues ahí se tunden dos personajes muy ligados al pasado, uno al tricolor y el otro al panismo para variar, que quieren sorprender a propios y extraños, camuflageados de color guinda y rojo a sus conveniencias, enfrascándose en una lucha campal y a los ojos vistos de todos, donde se demuestra su ambición de poder, provocando polarización, confusión local y un gran fanatismo por ambos lados, e incluso amenazan a ciudadanos que ellos son los buenos. Que ya les dijeron que si y no es cierto, pues aún no hay nada definido por esas tierras polvorientas.
Me refiero por un lado a los Hinojosa Rodríguez García, con Betito al frente, que ya siente que traen en la bolsa la candidatura bajo el otrora operador del cabecismo, el orgullo de Xicoténcatl.
Y por el otro lado un aprendiz de cacique que también en su tiempo dejó instalado el ex mandatario tamaulipeco García Cabeza de Vaca, su compadre de oro, me refiero a Arturo Barrón, pues la soberbia de su hermana a toda costa quiere que su hermano, el Jr., haga lo que no pudo hacer en su tiempo en este municipio desprotegido; recordemos que el líder moral se llamó Don Emeterio Barrón, mas no su padre.
Y descubriendo a los dos en cuestión, hablando del primero particularmente, no tiene aceptación entre la gente, solo por ser hijo de un ex alcalde Jorge Candelario Hinojosa se lo merece y que a su vez éste fue ungido por su medio hermano Luis Humberto Hinojosa Ochoa, que si viviera, le daría mucha vergüenza por el comportamiento de estos bribones, ya que si recordamos muy bien al Profe Luis Humberto, era muy institucional con los gobierno en turno.
Asimismo este pequeño –dizque- político, intenta con corta visión y corto mensaje o con pocas palabras, convencer a un pueblo sabio, que si bien perdona, pero no olvida. Allá y la 4T si lo nombra candidato. Veremos y diremos si el fundamentalismo del Obradorismo funciona.
Por hoy es todo, en la próxima seguiremos dialogando del acontecer político tamaulipeco.