Por José Gregorio Aguilar
Debido a la prolongada sequía, algunas áreas de pastizales en los ranchos se perdieron ya que requerían de mucha humedad para que pudieran seguir creciendo y servir de alimento al ganado, reveló el presidente de la Unión Ganadera Regional de Tamaulipas (UGRT), José Guerrero Gamboa.
Como consecuencia de esa problemática, recordó que algunos productores se vieron obligados a vender su ganado a precios menores, obteniendo menos ganancias pero, aclaró, no fue generalizado.
“Si se perdieron algunas cabezas, incluso se tuvieron que vender otras a precios menores, sobre todo para que no muriera por la falta de pastos y de agua para el ganado, pero la cantidad es mínima, en la mayoría de los ranchos los productores aguantaron e hicieron lo posible por mantener el hato ganadero”.
Guerrero Gamboa mencionó que en algunos ranchos ganaderos se inició con trabajos de rehabilitación de algunas áreas o siembra de pasto en otras, como parte de una estrategia para recuperar el hato ganadero.
Ahora, tras el paso de la tormenta tropical Alberto, que originó abundantes lluvias, las condiciones que imperan en Tamaulipas han mejorado notablemente, aparte del buen precio en que se comercializa el ganado tamaulipeco.
“Definitivamente que mejoraron las condiciones sobre todo en lugares donde nunca se había padecido una sequía tan prolongada como Aldama, las lluvias de la tormenta Alberto permitieron recuperar los pastos en la mayor parte de los ranchos dedicados a la producción ganadera en Tamaulipas”.
Para concluir, reiteró que lo que sigue es eso precisamente, seguir rehabilitando esas áreas de pastos que se perdieron por la prolongada sequía e incluso sembrar otras, para que de esa manera el hato tenga de donde alimentarse