Por Enrique Jonguitud
Ciudad Victoria, Tam.-Al margen de lo que suceda con el Plan B de la reforma electoral, el Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM) se ha ocupado de reducir gastos en la organización de los procesos electorales hasta por alrededor de 20 millones de pesos, dijo Juan José Ramos Charre.
Entrevistado en su oficina, el presidente del IETAM, dijo que ante las críticas del alto costo de las elecciones, el Instituto ha logrado ahorros significativos.
“Sí se puede ahorrar y hay muchas maneras de hacerlo una de ellas es que en el IETAM implementamos en el 2021 Programa de Resultados Preliminares propio y así en los procesos electorales del 21 y 22 nos ahorramos un conjunto de 20 millones de pesos”, sostuvo.
Ramos Charre refirió que además, en la producción de documentos y materiales electorales también se gastó menos “tanto la autoridad electoral nacional como el Instituto Electoral de Tamaulipas en el 2022 ejercimos 17 millones de pesos menos de documentación electoral en comparación con el 2021”
En relación al uso de urnas electrónicas dijo que se continúa con los planes para que cada vez se use más, de modo que se impriman menos boletas electorales y otra documentación, “la urna electrónica eventualmente sí pudiera abaratar costos, la reforma electoral reciente establece el que haya un proceso un periodo de 5 años para implementarla.
Ramos Charre dijo que el Instituto Nacional Electoral en conjunto con el Conacyt “habrán de instrumentar programas para completar el diseño de una urna de carácter electrónico”.
Añadió “Recordemos que en el 2022 tuvimos 50 casillas con urnas electrónicas, “y en el proceso electoral 2023 tanto de Coahuila como en el Estado de México hay también urnas electrónicas en algunas casillas”.
Sin embargo señaló que en el proceso electoral del 2024 todavía no se sabe si se usarán las urnas electrónicas, “aun o lo sabemos aún justo en su oportunidad el INE habrá de definir en los planes integrales del proceso electoral”.
El presidente del IETAM subrayó que el organismo seguirá buscando la manera de conseguir ahorros sin poner en riesgo la calidad de los procesos electorales.