Reynosa, Tam.- El exdirector del CONALEP y político natural por gusto y no por necesidad, Lic. Agustín de la Huerta Mejía, y que por cierto ha sido menospreciada su experiencia, tanto política como profesional, ya que fuimos testigos presenciales de su labor al frente de una institución educativa que se encontraba en el total abandono como es el CONALEP, y que a su llegada a esa dirección le dio un rumbo de excelencia, y la prueba esta que fueron, a su paso por ahí, ganadores de primeros lugares a nivel nacional y estatal, además de una coordinación con Universidades de Estados Unidos donde intercambiaron conocimientos educativos, seria insuficiente el espacio para narrar todo lo que De la Huerta Mejía dejo en Conalep.
En entrevista que amablemente nos concedió el amigo Agustín de la Huerta Mejía este fin de semana en la capital de Tamaulipas, nos comentó que: le preocupa la política divisionista de partidos que están haciendo algunos y dejando de lado la unidad de los mexicanos, dijo que, es más fácil generar odios, que propiciar amor, es más fácil dividir, que unir, es más fácil criticar que trabajar, es más fácil señalar, que dar resultados, es más fácil prometer que cumplir y de todo esto se ha dado cuenta el movimiento que ahora gobierna este país.
Le preguntamos sobre los movimientos políticos que se están dando en nuestro estado, y nos comentó que los tamaulipecos están preocupados, según su apreciación, sobre el rumbo político que tomaran las cosas en este año 2022 que por cierto dijo, es electoral, pues no se trata solo de cambio de Gobernador, se trata de definir el destino inmediato y en determinado momento a largo plazo de Tamaulipas hablando por el lugar donde estamos.
Las decisiones políticas que los tamaulipecos tomen en este año que se avecina, no solo es de colores o banderas, ni fobias y filias, esas decisiones afectarán sin duda a las próximas generaciones, se definirá si esta sociedad Tamaulipeca continúa defendiendo su incipiente y posiblemente llena de defectos democracia o por voluntad propia adopta un sistema político de izquierda que ha demostrado ser opresor y de malos resultados para sus gobernados.
