- Más de dos mil adultos mayores de la CDMX abarrotaron el icónico lugar, en festejo amenizado por el Grupo Caney y Acerina y su Danzonera.
- El Director General, Luis Antonio Ramírez Pineda, reconoce los años de vida y servicio que han brindado al Estado, la sociedad y sus familias.
- “Su optimismo y energía nos motivan a hacer nuestro trabajo con empeño y mejorar la calidad de la atención que les brindamos para su bienestar”, afirmó el titular Normativo de Prestaciones Económicas, Sociales y Culturales, Edgar Díaz Garcilazo.
Ciudad de México.- Más de dos mil jubilados, pensionados y adultos mayores abarrotaron el Salón “Los Ángeles”, ícono de ritmos populares con 82 años de tradición para bailar con la música del Grupo Caney y Acerina y su Danzonera, invitados por el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para festejar el Día de la Abuela y el Abuelo.
El Director Normativo de Prestaciones Económicas, Sociales y Culturales, Edgar Díaz Garcilazo, dio la bienvenida a la gran familia de adultos mayores del ISSSTE. Les transmitió de parte del Director General, Luis Antonio Ramírez Pineda, una calurosa felicitación. “Su optimismo y energía nos motivan a hacer nuestro trabajo con empeño y a mejorar la calidad de la atención y los servicios que en el Instituto les brindamos día a día para su bienestar”, enfatizó.
Dijo que “todos quienes trabajamos en el Instituto reconocemos los años de vida productiva y servicio que han brindado al Estado y a la sociedad, por ello tenemos el firme propósito de proporcionarles más y mejores servicios como las Casas de Día, mayor oferta de turismo a precios económicos a través de TURISSSTE; incrementar las visitas recreativas de jubilados y pensionados radicados en los estados a la Ciudad de México a los centros Convive y Vacacional ISSSTEHuixtla, en el estado de Morelos”.
En el ISSSTE los queremos sanos, activos e integrados a sus familias y a la sociedad, agregó Edgar Díaz, para posteriormente unirse al baile con entusiastas abuelas.
Joviales, ataviados con sus mejores trajes, vestidos y accesorios como sombreros, plumas y lentejuelas, las abuelas y abuelos dieron muestra de sus mejores pasos de baile, en ritmos como danzón, cumbia, salsa, cha-cha-cha, rock and rol y swing, con fabulosas interpretaciones de las orquestas invitadas.
Lupita Rangel, bisabuela de 60 años y derechohabiente del ISSSTE, asegura que “llegar a la tercera edad realizada como hija, esposa, madre, con salud y alegría de vivir, es una gran satisfacción; junto con mis amigas, disfrutamos mucho de bailar en eventos como este; no tener pareja no es impedimento para participar”.
Por su parte, Ramiro Sánchez Renovato, de 76 años, profesor jubilado, sobresale en la pista por su porte y atuendo 100 por ciento pachuco, con un saco blanco de solapa ancha y un sobrero de terciopelo rojo con su respectiva pluma, bigote perfectamente aderezado y la clásica actitud de conquistador, también es feliz abuelo de cuatro nietos y un hombre enamorado del danzón.
Disfrutar del Día de la Abuela y el Abuelo en el Salón “Los Ángeles” tiene mucho significado, ya que es un lugar donde debutaron en sus tiempos de gloria las orquestas de Damaso Pérez Prado, las sonoras Matancera, Maracaibo, Santanera y Acerina y su Danzonera.
En esta fecha especial se creó una atmósfera mágica donde la efusividad y el amor convergieron como en el caso de María del Carmen Leo Cervantes y Gael Ramírez Celso, un par de abuelos novios radicados en Iztapalapa, que derrocharon estilo y miel en la pista; vivo ejemplo de plenitud.