- Los felinos lograron sumar tres puntos en el Estadio Universitario tras vencer 3-2 a Juárez sin público.
Monterrey, NL.- Los alrededores del Estadio Universitario no eran los mismos que tradicionalmente se pueden observar cada 15 días en San Nicolás de los Garza, y es que apenas horas antes el anuncio de qué el partido ante el equipo de Bravos sería a puerta cerrada se había dado, era un inmueble nunca visto así y es que los incomparables suelen siempre estar presentes pero ahora un tema extra cancha llamado Covid-19, Coronavirus, era el causante principal de este hecho.
Apestar de esto habían centros de control para los pocos presentes de los medios de comunicación, adentro, era un silencio, banderas ondeando solas en las gradas pintaban de color un poco El Volcán.
En el aspecto futbolístico dentro del rectángulo verde el duelo comenzó muy parejo con un Tigres que comenzaba a desesperar a Juárez, equipo que corría detrás del balón cerrando los espacios que Los locales generaban, como lo fue al minuto 11 cuando Gignac cedió de cabeza a un Valencia que entraba solo al área y que tras una barrida a tiempo se evitó el 1-0 para los del cerro de la silla.
Seis minutos más tarde, una vez más Enner, ahora con un balón filtrado cedido por Raymundo Fulgencio, bajo el esférico de pecho y con poco talento buscó controlar el balón, sin que la jugada trascendiera.
Mientras los minutos pasaban y el silencio se sentía en una cancha sin público en San Nicolás, el grito se escuchó pero para mal de los locales para el lado de los fronterizos, y es que Darío Lezcano entró al área después de un pase de derecha a izquierda y ante la salida de Nahuel Guzmán logró quebrar al portero felino para poner el 1-0 sorpresivamente para los suyos al minuto 28.
Así los minutos pasaron y aunque tigres busco empatar el marcador esto se complicó con un equipo que ofensivamente se cansaba de fallar y un plantel de bravos que peleaba de tú a tú en cada terreno de juego.
Tuca se fue con el rostro de enojo al vestidor buscando que los segundos 45 minutos su equipo lo convenciera.
Apenas tuvieron que pasar cinco minutos y ya con Eduardo Vargas sumado a la ofensiva el plantel de Tigres más con una jugada fortuita que creada por ellos mismos, lograron anotar el empate después de que el portero visitante Mellado rechazó un balón sin peligrosidad de Valencia, Luis Quiñones terminó por empujar el gol que dio el empate.
Sin embargo la reacción felina apenas comenzaba y es que luego de que André-Pierre Gignac fuera expulsado y el juez central cambiara su decisión gracias al VAR, fue el propio francés quien al 57 entró al área y en una línea horizontal cruzó el área para después sacar un disparo cruzado y raso a la izquierda del portero para colocar su octavo gol en el torneo y el triunfo parcial felino.
El duelo bajo su presión alta, pero sin duda Tigres no se quería quedar con el triunfo por un solo tanto y para esto después de varios minutos sin acciones de de peligro al 75 Vargas aumentó el triunfo para Tigres después de un disparo fuerte que no pudo evitar Mellado.
El duelo terminó antes con un gol inesperado de Rolan que puso el 3-2 final.
Así se vivió este día de “asueto” para el público regio, una noche que será histórica por los protocolos de salud tratando de evitar la propagación del Covid-19 un tipo de Coronavirus que se ha vuelto pandemia en los últimos días.
