Budapest.– La selección húngara sorprendió a la francesa al arrancarle un empate 1-1, este sábado en su partido de la segunda fecha del grupo F de la Eurocopa-2020, disputado en el abarrotado Puskas Arena de Budapest.
El carrilero Attila Fiola se erigió en el héroe de Hungría cuando adelantó a los suyos, tras una buena pared con Roland Sallai, poco antes del descanso (45+2), mientras que el atacante Antoine Griezmann logró el tanto del empate francés (66).
«Es uno de los mejores días de mi vida, quizá el mejor. Estoy muy contento después de este gran partido, es un gran resultado», declaró Fiola con emoción. «Estoy orgulloso del equipo, los fans han generado un super ambiente hoy».
La campeona del mundo es provisionalmente líder de la llave F con 4 puntos, pero debe esperar al resultado del Portugal-Alemania de este sábado en Múnich (16:00 GMT) para ver en qué puesto afrontará el tercer y último partido de la fase de grupos, contra los lusos (2º).
Hungría, con una unidad, adelanta a Alemania y es momentáneamente tercera del grupo, manteniendo sus esperanzas de pasar a octavos de final. En su último partido, el miércoles (19:00 GMT), se medirá a los germanos en Múnich.
«Tras una primera parte en la que debimos ponernos por delante, nos encontramos por debajo en el marcador por su única ocasión», lamentó Didier Deschamps, seleccionador galo, en declaraciones a la televisión TF1.
«Evidentemente, en su casa, con este apoyo (del público), no es lo que esperábamos en este partido», añadió.
Después de unos minutos de tanteo, Francia protagonizó el inicio de las hostilidades con un disparo cruzado desde fuera del área de Karim Benzema, que tuvo que desviar el meta húngaro Péter Gulácsi (14).
Momentos después, un cabezazo de Kylian Mbappé dentro del área magiar rozó el poste izquierdo de Gulácsi (17), tras centro por la izquierda de Lucas Digne, titular este sábado en detrimento de Lucas Hernandez.
Hungría marca en su peor momento
La ocasión más clara de la primera parte estuvo en las botas de Benzema. Mbappé recibió un centro al área, arrastró consigo a los defensas y cedió el balón al ’19’ en cuanto le llegó. El delantero del Real Madrid estaba solo pero golpeó mal, con el exterior, mandando la bola fuera (31).
Hungría estaba completamente KO y no podía más que achicar agua. Sus intentos de salir de su propio campo morían en la divisoria del terreno de juego, donde los mediocampistas galos habían levantado su muralla. Pese a ello, el ruidoso Puskas Arena no dejaba de alentar ni un minuto.
Paradójicamente fue en ese contexto donde llegó el tanto local. Fiola trazó un pared con Sallai en terreno francés y dejó atrás en su carrera a Benjamin Pavard y Raphaël Varane. Cuando penetró en el área, armó la pierna derecha y el balón entró pegado al palo diestro de Hugo Lloris (45+2).
El gol sicológico pareció afectar un poco a la selección francesa.
Deschamps decidió actuar y sacó a Ousmane Dembélé por Adrien Rabiot para castigar a la defensa húngara con su movilidad. El extremo del FC Barcelona avisó nada más entrar, con un lanzamiento tras recorte que se estrelló en el poste izquierdo de Gulácsi (59), pero tuvo la mala suerte de lesionarse y debió ceder su puesto a Thomas Lemar en el minuto 87.
Griezmann fusila
Ahora ya no era como en el primer periodo y cada vez que lo intentaba Francia, Hungría se acercaba al área rival buscando sentenciar el partido. La salida de Rabiot provocó las fisuras en el muro galo.
Poco importaba porque Francia se veía menos encorsetada. En el minuto 66, Lloris sacó de puerta pillando a los húngaros lejos de su campo, desprevenidos. Los centrales locales no consiguieron despejar el balón, que controló Mbappé en el interior del área de Hungría para ponerlo en el punto de penal. Hubo un rechace y Griezmann a la carrera fusiló a Gulácsi.
El arquero del RB Leipzig salvó posteriormente en dos ocasiones a los suyos. Primero despejó un potente aunque centrado tiro de Mbappé (82) y casi sin tiempo para recomponerse atrapó un intento más suave de Corentin Tolisso (82).
Francia lo siguió intentando pero cada vez mostraba menos claridad en sus ideas. Hungría, además, no dio muestras de debilidad, cómoda con las líneas prietas atrás y se encargó de dormir el partido hasta el pitido final.
«Es difícil incluso ante Hungría, así que vamos a tener que preparar bien el partido contra Portugal» en la tercera y última jornada, advirtió Griezmann en la televisión beIN Sport.