Por José Gregorio Aguilar
Tamaulipas, después de Campeche e Hidalgo, es el estado donde más se incrementó el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) reportó la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
Su presidente, Cuauhtémoc Rivera dijo que la variación de precios de la canasta básica alimentaria, que se compone de cuarenta y cuatro productos corresponde del período abril a mayo del presente año.
El estudio de mercado fue realizado en los 32 Estados de la República, con una muestra aleatoria domiciliada, ambulatoria y estratificada en más de 200 puntos de venta en tres niveles de consumo: alto, medio y popular.
El precio promedio de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) es de mil 830 pesos con una variación de 1.14% al aumentar su precio en promedio 20 pesos con 60 centavos.
Detalló que los cinco estados con la CBA más encarecida resultaron ser Campeche con un 12.73 por ciento; Hidalgo, con 9.14 por ciento; Tamaulipas, con 8.24 por ciento mientras que Chiapas y Puebla reportaron un incremento del 6.20 y 5.47 por ciento respectivamente.
La ANPEC precisó que los productos que más aumentaron en el último mes fueron el chile jalapeño, el chile poblano, el aguacate, el jitomate y el huevo.
Refirió que de manera consecutiva, en los últimos meses, la inflación ha tenido un rebote. El último reporte correspondiente a la primera quincena de abril señaló que la inflación se aceleró a 4.63 por ciento.
“Esto se explica por muchas razones: el aumento de la gasolina, los efectos de la sequía y la guerra, los hechos de violencia que encierran a la población en sus hogares, las extorsiones carreteras y el cobro de piso, la disminución del poder adquisitivo de cara a una economía caliente y la falta de políticas públicas efectivas que fortalezcan el consumo popular y robustezcan la producción agrícola nacional. En suma, generan una inflación al alza y el encarecimiento sostenido de productos como el cacao y el azúcar”, explicó.
Y para acabarla de amolar, para la primera semana de mayo el gobierno no otorgará estímulos al diésel, dejándolo en igualdad comercial que la gasolina premium y redujo el subsidio de la gasolina magna, quedando sus precios por litro de la siguiente forma: magna 23 pesos con 60 centavos, el diésel a 24 pesos con 60 y la premium a 25 pesos con 60 centavos.
“Esta medida se da en tiempos electorales cuando tradicionalmente los gobiernos se abstienen de dar golpes de timón al bolsillo de los electores para evitar un voto de castigo; sin embargo, corresponde seguramente a la caída de los fondos petroleros en el primer trimestre del año, lo que coloca al país en una situación de mayor dependencia energética, pues la producción nacional no corresponde a su consumo, por lo que habrá que seguir importando hidrocarburos”, refirió Rivera.
En otras palabras, se acaba de infringir un “gasolinazo” a la economía nacional que ya está impactando en los precios de los productos del mercado al alza, fortaleciendo la tendencia inflacionaria en marcha.