Por: Chano Rangel
Hay quien dice que las comparaciones son nefastas, y comparto esa idea, comparar las cosas o individuos es realmente inaceptable, pero en México, eso es un hecho que al parecer genera muchos votos. Un ejemplo claro lo vivimos en la pasada elección del Estado de México, donde comparaban a López Obrador con Hugo Chávez, ex presidente de Venezuela, algo que era absurdo, pero que en su momento estabilizó la caída libre que el PRI llevaba en esa entidad.
Ahora se compara a muchos gobernadores con sus antecesores, algo que es deleznable, porque siempre he pensado que, cada tiempo y espacio es diferente en circunstancias y momentos. Por eso depende de cada gobernante hacer las cosas en beneficio del ciudadano, y con ello ganarse el apoyo del respetable.
Pero eso pocas veces ocurre, la tarea principal en nuestro país, es culpar al que se fue de los errores, si algo sale mal, el culpable fue el ex, si no se hacen las cosas, el culpable es el ex. Y así se puede ir el tiempo; y la plataforma de in operatividad es cargada de lleno en el que se fue. Luego en cada informe salen números de hielo, y los discursos se enfocan en decir “Yo hice más, que el que se fue” y dan cifras y números, cuando la verdadera gobernanza, se debe de dar, en hacer lo propio y sin comparaciones.
Un ejemplo claro de culpas y comparaciones, son los resultados en seguridad, muchos ciudadanos como usted y como yo, dicen “estábamos mejor, cuando estábamos peor” cosa rara, pero así es, a nivel nacional los índices delictivos han crecido de manera alarmante. Los números van en aumento, pero ahora el secretario Osorio Chong, argumenta que gobernadores y alcaldes han dejado de hacer su parte en la materia, y que eso acrecienta el índice delictivo. Razón la tiene, pero de salida, si lo hubiera dicho al inicio del sexenio, quizá otra fuera la circunstancia. En materia de seguridad.
Lo cierto es que ya no se pueden gobernar con culpas del pasado, el presidente actual y el que venga, deben de asumir su rol como jefes de estado, agarrar el toro por los cuernos y hacer de este país, un lugar seguro para transitar y vivir.
Dejar de hacer y quedarse quietos da el mismo resultado, que apretar un gatillo, así es que si el índice delictivo va en aumento, en mucho tiene que ver la actuación del gobierno en sus tres órdenes. Ya el 2018 se acerca, los que no hicieron nada pagarán en las urnas sus desplantes y su ocio, y los que trabajaron recibirán su recompensa. Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Mire que mucho se ha hablado del informe del diputado Edgar Melhem, lo cierto es que conjunto a su alrededor, a un sinfín de clase política, y eso si de todos colores. Más de 1500 invitados se dieron cita en Río Bravo, de todo el III Distrito llegó gente y de algunas otras ciudades que ven al diputado con seriedad y trabajo.
Lo cierto es que el evento fue masivo, si la idea era medir el musculo y fuerza, eso ya quedó demostrado que lo hay. De testigo estuvo el líder de los diputados priistas en San Lázaro, César Camacho Quiroz. Figura nacional de primer orden.
El líder del PRI Sergio Guajardo y la secretaria general Aida Zulema Flores Peña, dieron testimonio del informe legislativo. El lugar lucio lleno, el musculo político, está claro que Edgar Melhem lo tiene, y un espacio en la siguiente elección lo tiene seguro ¿ Acaso senador? Al tiempo.