Por: Chano Rangel
Fríos se han de sentir los miembros de Morena, al ver las primeras encuestas en Tamaulipas, de esos fríos que calan hasta en la médula del hueso, no son nada halagadoras, pero que más se podía esperar, después de un proceso interno viciado de principio a fin.
La creencia de la militancia de ese partido de que todo había cambiado para vía quedó en una utopía, y la gran farsa a puso al descubierto la ex alcaldesa de Reynosa Maki Ortiz, quien participó como aspirante externa a la sucesión gubernamental de Tamaulipas. Los números del ex edil reynosense, son impresionantes, más de 150 mil votos en su reelección, cifra histórica y difícil de alcanzar en el futuro mediato, premios internacionales avalados por la ONU, por su gestión en la administración pública municipal, y popularmente su nombre era el más conocido en la entidad solo por debajo del gobernador actual. Pero eso de nada sirvió, la posición estaba pactada y pagada por anticipado.
Ahora esas voces se han dado cuenta del error, el senador suplente, Alejandro Rojas, hizo pública una carta, donde da a conocer datos precisos, y hará público en los próximos días, donde da a conocer la estrepitosa caída del candidato morenistas.
Pero vayamos por partes, y en eso quizá tenga la razón el senador suplente; el sentido común supera cualquier encuesta, nadie sabe que hizo el candadito moreno, como senador, lo que sí se sabe por qué salido a luz pública a través de redes sociales, es la vida de jeque que se daba, en vuelos de lujo privados, en camionetas blindadas, con el patrocinio de recursos de dudosa procedencia.
De los precandidatos que estuvieron en la falsa disputa, nadie ha dicho que se alinea al proyecto actual del precandidato e incluso, se especula que por debajo del agua, operan a favor de otros aspirantes; dejando claro que aunque no protestaron por la farsa, en la que se convirtió la encuesta y proceso de Mario Delgado, no están de acuerdo en la imposición amañada del senador, que hoy por hoy, parece ser que sus aspiraciones se construyeron con arenas movedizas.
El fondo ha salido a flote, porque al ver los números cuantitativos, el proyecto morenistas de quedarse con la gubernatura de Tamaulipas, se ve cada vez más lejano por varias razones. Y una de esas es que jamás imaginaron que se concretara una alianza de partidos en Tamaulipas, y que como siempre solo ellos fueran los buenos para todo y sobre todo, teniendo como culpables a todos los del pasado, pero la saliva que escupieron cayó en su cara, el pasado de corrupción, los alcanzó y están por ser el gobierno más corrupto de la historia de este país, y Tamaulipas no es el sur de México.
De forma cualitativa, nadie lo vio llegar, sobre todo contar con cualidades de negociación, de liderazgo y de cohesión, César Verástegui, sin pelear y agrupando se fue metiendo en el consciente colectivo, hasta ser hoy en día el “trending topic” en todos los sentidos, redes sociales y medios de comunicación.
Mientras Morena, engañaba con una encuesta patita, una convocatoria hecha con papel sanitario ya usado, y una guerra civil sin cuartel; El Truco, adhería, invitada, y conformaba una verdadera campaña con todos los liderazgos regionales, primero bajo la plataforma y arropado por la asociación civil “todos por Tamaulipas” y después por una consolidada y sólida alianza de PAN-PRI-PRD, que mostró que iba por todo, y en su primer acto en el recinto ferial Tamaulipas, quedó claro el tamaño de su operación.
Tejedor de alianzas, incluyente, El Truco, subido poco a poco, con pies de plomo y su crecimiento se siente y se ve, el priismo ha disipado dudas, y cada día se ve más unido en torno al Verástegui Ostos, una muestra de humildad, fue vista en Reynosa, cuando visitó la casa particular de Benito Sáenz Barella, ex candidato priista al gobierno municipal de Reynosa, a dejar abiertas las puertas, para Oscar Luebbert y Bético Valdez; y mostrar profundo respeto al liderazgo innegable en la ciudad de Maki Ortiz.
Quizá esa es la respuesta a las incógnitas cuantitativas y cualitativas de las primeras encuestas, que dan un margen de ventaja al líder de la Alianza “Va por Tamaulipas”.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Sin lugar a dudas, el alcalde de Matamoros, Mario López, ha hecho las cosas bien, en principio se le acusaba de ser producto de una ola guinda, de ser candidato externo, pero con el paso de tiempo y en su primer trienio, esos rumores fueron acallados, el trabajo en la administración pública, le dio el soporte y fuerza para lanzarse a una elección difícil, que superó con creces.
Mario López, fue el alcalde reelecto con mayor ventaja de votos, más de 108 mil sufragios, y con esto consolidó una carrera en ascenso, que quizá fue desaprovechada por las cúpulas morenistas en el proceso de sucesión gubernamental.
Muy coherente, López Hernández, no enfrentó, ni peleo, regreso al municipio a seguir trabajando con más fuerza y con proyectos viables en desarrollo urbano e infraestructura, en la segunda ciudad más grande de Tamaulipas, la obra social y pública, se siente y se nota en todos los rincones del municipio.
Sin lugar a dudas Matamoros, juega un papel fundamental en el desarrollo de la entidad, bajo el liderazgo de Mario López, aún el crecimiento político y económico en tiempos difíciles, sigue avanzado hacia arriba; al final el trabajo y la dedicación da la razón a quien la tiene.