Por: Chano Rangel
Han pasado prácticamente 12 meses, desde que el actual edil de Reynosa hizo pública su aspiración de ir por la reelección, a la que tiene derecho con las nuevas leyes electorales, y desde ese momento también empezaron a salir los disparos del fuego amigo, de los adversarios y de manos que mueven hilos, y se esconden bajo la máscara democrática.
Fue precisamente en esta época, en que también se revivió la vieja denuncia en contra del edil, que lo acusa ante tribunales locales de la mano de un abogado de origen tabasqueño, que también al inicio de la admiración de Carlos Peña Ortiz, fungió como contralor social, pero sus ambiciones lo llevaron de nueva cuenta a ser según lo cuenta el abogado, defensor de las causas justas.
Desde que el alcalde mostro sus aspiraciones, solo en ese momento otra vez, vuelven a resurgir los ataques, los dimes, diretes y demás, en redes sociales y algunos medios amarillistas de la ciudad, además sus adversarios políticos contrataron algunas plumas para golpear políticamente al edil.
Desde ese momento el caminar fue por caminos empedrados y llenos de obstáculos, hasta el día de ayer que el delegado de Morena, Mario Llergo, dio a conocer que quien encabezara la formula por Reynosa, será Carlos Peña Ortiz, y uno de los que soltó en colera, fue precisamente el abogado acusador, apoyado por el diputado Marco Gallegos, que también tenía el sueño guajiro de ser tomado en cuenta para la postulación más animado por los adversarios internos del edil, que por sus propios méritos y trabajo.
Además de este, también el diputado Humberto Prieto, se envalentono y se sintió con el derecho de hacerle la chica al alcalde, olvidando que la pasada contienda, fue gracias a la fuerza política del edil, y de su arrastre popular que muchos de los actuales diputados locales llegaron a esa posición, por decirlo de otra manera, ganaron de muertitos.
Sin embargo, a la medida que pasaban los días, las encuestadoras serias y responsables de sus trabajos demoscópicos, daban a conocer los números fríos, y en todas ellas Peña Ortiz, era el adversario para vencer, la encuesta interna de las definiciones de morena, no arrojo resultado distinto, es el edil, quien goza de las simpatías y el apoyo de lore reynosenses, para ir por la reelección municipal.
¿Qué hubo desacuerdo? Claro no hay democracia perfecta, pero poco a poco, los ánimos se deben de calmar, sobre todo a aquellos que les vendieron la idea que edil había sido descalificado para la competencia, información mal redactada y usada con la única finalidad de ponerle piedras en el camino al alcalde para su reelección.
Pero tiempos se llegan y las definiciones se toman, en un conocido centro social de Reynosa, en delegado Mario Llergo, con autoridad y en presencia de los contendientes dio a conocer el nombre del que gano las encuestas, y algunos informes no confirmados, aseguran que fue Carlos Peña quien gano todas las encuestas del partido, con amplio marguen de posicionamiento e intención de voto.
Desde luego que aquellas plumas y medios que tomaron partido empezaron un ataque desde ayer mismo sabiendo ya la noticia, el delegado fue claro, es Carlos, y morena trabajara en su entorno, para seguir gobernando la alcaldía más grande de Tamaulipas.
Que habrá opiniones distintas claro estoy de eso, que habrá quienes no estén de acuerdo en esta postulación, por supuesto, como exprese no hay democracia perfecta, en los próximos días se darán a conocer los nombres de los aspirantes al congreso local, muy seguramente en ese círculo verán en Reynosa, a estos que quisieron allanarle el camino al actual edil, no será un premio de consolación, si no un verdadero reto, para aquellos que dicen tener amplio apoyo del reynosense.
Por lo pronto, ya el edil tendrá que pedir licencia en los próximos días ante el cabildo, para dedicarse de lleno a la campaña política, y en sus hombres llevará el peso de ganar la ciudad más grande de Tamaulipas.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Donde se armó tremendo aquelarre fue en matamoros, con las declaraciones del alcalde con licencia Mario López, que no acepta la postulación del diputado Beto Granados, que se quedó con la postulación, como lo anuncio el lunes el delegado Mario Llergo, las palabras del López Hernández calaron hondo y ayer ya se dejaban sentir las muestras de apoyo de un lado y de otro.
En una entrevista López Hernández, afirmo que él había propuesto un proyecto político, para que matamoros siguiera con la misma tónica de crecimiento, y que por cuestiones políticas se detuviera, donde los errores del pasado no volvieran a repetirse, quizá en esta ocasión al alcalde se le olvido en arte de la política “tragar sapos y no hacer gestos”
Sin embargo, quienes hace apenas unos días lo apoyaban con vehemencia, fueron los mismos que cuestionaron su postura el día de ayer, desde el domingo con la llegada de los candidatos al senado por Morena, la división quedo de manifiesto, porque a diferencia de Olga Sosa y José Ramón, los aspirantes verdes, Maki Ortiz y Eugenio Hernández, si supieron y vivieron los apapachos del edil, de la estructura política y del control de las bases electorales en Matamoros, la película continuara.
