Por: Chano Rangel
Tamaulipas, tiene una geografía multifacética, desde Nuevo Laredo a Tampico, y desde Matamoros al Mante, cruzando por la sierra de Cucharas o la Sierra Madre Oriental, su vasto territorio es también tierra de grandes desigualdades sociales.
La mayor cantidad de esta en los 10 grandes centros poblacionales, Tampico, Ciudad Madero, Altamira, Mante, Ciudad Victoria, Matamoros, Valle Hermoso, Río Bravo, Reynosa y Nuevo Laredo. Ahí el estado concentra el 85 o 90% de su población y los demás municipios son solo satélites de los grandes centros poblacionales.
Pero en esos municipios de en medio como San Fernando, Soto La Marina, Aldama, Padilla, González, Gómez Farías, Xicoténcatl, Tula, Jaumave, Camargo, Díaz Ordaz y Miguel Alemán, también fluye sangre caliente y las alteraciones políticas, son en los hechos un submundo de ebullición local, de características únicas.
La temperatura también sube y los grados Celsius en la política doméstica se vuelven un aspecto cultura. De los municipios más pequeños poco se sabe, porque la información fluye muy poco o no la hay, aunque su población contribuya de manera sencilla al crecimiento de Tamaulipas.
La conectividad política en estos momentos se vuelve un factor de unidad, pero también de adversarios, de acuerdos y el folclore, de esas historias hay muchas, como cuando 4 hermanos compiten por la alcaldía de uno de estos municipios y no pudieron llegar a un acuerdo, para ser uno el candidato y al final vencedor resultó ser un quinto en discordia.
En Cruillas por ejemplo, Olga Lidia Hernández, llegó al poder por Morena, teniendo un arraigo en el PRI, durante prácticamente toda su vida política. Ahora la reelección que la ley le permite, la coloca en las preferencias electorales de este histórico pueblo.
Pero es estos ayuntamientos donde se dará la pelea más cerrada, en Miguel Alemán, Servando López del PRI podrá reelegirse, lo mismo pasa en Camargo con Lety Peña Villarreal, donde los grupos políticos locales pareciera que están de acuerdo con la forma de gobernar de los ediles.
En San Fernando, a pesar de aparecer personajes como cada temporada de elecciones, todo parece indicar que la abanderada de Acción Nacional será Marina Ramírez, esposa del actual líder de los ganaderos en Tamaulipas.
Desde hace más de 4 años, el trabajo de Marina no cesa y es la aspirante mejor ubicada dentro del entorno político local de cualquier partido con participación electoral.
Lenin, no debería tener ningún problema con su reelección en Tula o Enrique Gámez en Soto La Marina, donde el trabajo será calificado en las urnas y en este sentido, factible es que continúen por 3 años más.
Como podrán ver a pesar de que estos municipios intermedios, no son tratados en columnas o notas informativas de manera frecuente, son también parte esencial en la democracia tamaulipeca.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Ayer la CFE, cortó el suministro eléctrico a la estación de bombeo Anzaldúas, principal sistema de abastecimiento de agua para la ciudad de Reynosa, si bien es cierto que puede haber adeudos, justo también es reconocer que los esfuerzo de la alcaldesa Maki Ortiz, para sanear a la COMAPA de Reynosa, han sido sin precedente.
El gerente general reconoció que hay adeudos con la comisión federal de electricidad, y en su aclaración afirma, que los ingresos del organismo operador en esta pandemia, se han ido a la baja, por la inmovilidad de las familias de Reynosa.
La pandemia del COVID-19, ha afectado sustancialmente los ingresos de la COMAPA, es por ese motivo también que al edil, implementó el programa de subsidio en el pago de agua, a las familias vulnerables, para amortizar el costo del confinamiento de miles de familias reynosenses.
El acercamiento y las pláticas tendrán que seguir, una ciudad como Reynosa, no puede sufrir por el corte de energía eléctrica, de una dependencia federal, sin un sentido humanista y con amplios tintes electoreros.
