Por: Chano Rangel
Mire lo que son las cosas, hace apenas 2 años la visita de un precandidato presidencial hubiera sido en el estado Marte R. Gómez o en algún sitio donde la capacidad fuera mayor a 10 mil personas, era la época de pulverizar al adversario. Ya no fue así, el evento de la visita del precandidato José Antonio Meade, fue en el gimnasio de la Universidad La Salle, con una capacidad máxima de unas 3 mil personas.
El aspirante llego con compañero de lujo Manuel Cavazos Lerma (no se ría, que es en serio) y hasta el mismo líder del PRI Sergio Guajardo y Aida Zulema, secretaria general, mostraron su disgusto. La imagen del ex gobernador no es nada buena, el repudio y odios están hasta por debajo de las piedras, las ofensas y maltrato fueron muchos, y eso aun no se olvida.
Pero ahí estaban salvo aquellos que ya no invitaron, como Felipe Garza, Javier Villarreal, Erasmo Gonzalez, Ramón Garza Barrios, Poncho Sánchez, y un sin fin de ex priistas que ahora andan en MORENA. Pero ahí estaba el nuevo PRI, encabezado por Cavazos Lerma, Baltazar Hinojosa, Edgar Melhem, Toño Martínez (el sencillito), Paloma Guillen, Alejandro Guevara, Yahleel Abdala, Maria Esther Camargo, Monserrat Arcos, Ramiro Ramos, todos en primera plana, ese es el nuevo priismo de Tamaulipas.
El horno se sobrecalentó, las reuniones previas, con la plana mayor del PRI y empresarios, se dio en un tono de descontento, porque a una semana de darse las convocatorias, lo único que se siente y se ve en el CDE es desorden y rio revuelto. Nadie ha dado el golpe en la mesa y puesto orden; Reynosa es un ejemplo de ello, y si la ciudad más grande e importante en votos sufre ese desorden, pues imagine las chicas.
La imposición, como lo pretende hacer el ex gobernador con su alter ego y junior Miguel Cavazos, en el distrito III, que por cierto, no conoce ni con cuantas tortillas llena, y como si fuera época de reyes, el junior piensa que por ser hijo dl ex gobernador tiene derecho divino. Pero no es así el PRI deberá replantear en los próximos días y horas quienes le garantizan pelea, que perfil le asegura una competencia digna, ya no se diga ganar si no competir y dar buenos votos al candidato presidencial, porque la urgencia no es quien pueda ganar, si no aquel, que aunque perdiendo acarree votos al nacional.
Para muchos la lectura es adversa, un priismo sin líder máximo, incapaz de poder tomar decisiones, acostumbrados a que la lista la daba a conocer el gobernador en turno y punto se acabo la discusión. Ahora ya no es así, un gobierno diferente, tendría que obligar a tomar acciones diferentes en circunstancias totalmente adversas. Y si la visita a Victoria de Pepe Meade, no lo aclaro entonces, el que se vaya al ultimo que apague la luz. Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
Y siguiendo con la política, este fin de semana se levantó la encuesta del PAN en las ciudades donde tomará una decisión bajo ese método, de buenas fuentes sabemos que en Matamoros, Verónica Salazar, trae los mejores números, arriba, muy por encima del sencillito Carlos García, que dicho sea de paso, aparece en las encuestas por debajo del alcalde Chuchin De la Garza.
Pero también se dieron en San Fernando, ahí el edil Pepe Ríos saco amplia ventaja como dicen en el argot del rancho, harta llena y copeteada, los números dejan sin posibilidad algunas a todos los demás suspirantes, ni Pedro Luna y Maybella, tienen entre ambos la cifra alcanzada por el edil.
Son fríos, las matemáticas no mienten, y la distancia le da la certidumbre al alcalde de ir por la reelección, y a los adversarios, si se les recomienda, y ese consejo es personal. Seguir trabajando, no hay liderazgo que salga de la noche a la mañana, no se hacen en 1 año y medio lideres de masas, tampoco figuras de un arrastre popular inusitado, porque solo el trabajo continuo y permanente hace bases solidas para los liderazgos regionales.
Por lo pronto el panismo de Tamaulipas, ya tiene en su haber las encuestas, solo falta saber quienes irán en la lista y quienes de plano se bajan, porque los números no los favorecen, falta menos, y esperaremos pacientes.