Por: Chano Rangel
Después del 6 de junio México, quedó dividido en 2, al ganar 11 gubernaturas, el partido en el poder, gobernará la mitad del país, y otra mitad dividida entre el PAN y un alicaído PRI, que fue el gran perdedor de esta contienda electoral, al perder 7 de las gubernaturas, dos más el PAN, y la aliancista de Michoacán, que también cayó a manos de Morena.
Con estas 11 gubernaturas, el presidente cosecha al dedillo la división política del país, ahora sí México está dividido en dos partes, de manera literal, 16 entidades para la oposición y 16 para el partido en el gobierno, al parecer las frases del odio y del divisionismo si dieron buenos resultados al mandatario.
Lo que se ve a leguas es el oportunismo político, al ver candidatos postulados por Morena, que nada tienen que ver con su ideología, Mario Delgado es uno de ellos, Américo Villarreal, Javier Villarreal, y l misma derrotada de Clara Luz Flores, de toda su vida priista, que renunció al poder que tenía dentro del PRI, en Nuevo León, para perderlo todo en la pasada contienda.
Es precisamente Nuevo León, el gran laboratorio de las elecciones, es el estado que por sí solo, es una económica mundial, ahí el grupo de los 10, jugo y gano, jugó a dos bandas por un lado Samuel García del Movimiento ciudadano y por otro lado, Adrián De la Garza del PRI, en ambos dos finco sus chequeras, su poderío y financio ambas campañas, y una vez destronada del primer lugar de las preferencias electorales la candidata de Morena, entonces dejaron correr a los gallos, su propósito estaba ya en marcha y aunque los morenos intentaron colocarse en grupo del hoy ganador Samuel García, este simplemente les cerro las puertas.
Algunos tamaulipecos operadores políticos, salieron corridos del vecino estado, Ricardo Gamundi, Bético Valdés, que anduvieron pegados con la morenista priista Clara Luz, simplemente fueron bateados por Abel Guerra, el priista tamaulipeco y creador de un grupo político en Escobedo Nuevo León, casado con la aspirante derrotada.
Para los priistas fue en competencia por las gubernaturas, fue simplemente desastroso, perdieron sus últimos bastiones, y qué decir del líder nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, que perdió en su mismo estado con una vetusta candidata de Morena Layda Sansores.
El ejemplo de Nuevo León, es muy claro, y el laboratorio les trajo a los mexicanos, el ejemplo claro de que se puede hacer en muchos estados del país, cuando no se quiere que el fomento del odio y la división prospere, entonces los regios dieron muestra de que se puede hacer al respecto.
Tamaulipas es un caso aparte, que analizaremos más adelante, ya una vez concluidos los conteos y alegatos finales, como el caso de Nuevo Laredo y Valle Hermoso, y el algunos distritos locales que aún están en disputa. Lo que si les adelanto, es que si bien es cierto que morena arrasó en la frontera, también es cierto que solo las siglas fueron en juego, los candidatos eran externos.
También escribiré sobre Reynosa, pero después que los resultados oficiales sean dados y siendo respetuosos de la autoridad electoral. Así es que calma muchachos.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
El ayuntamiento de Reynosa, que encabeza la doctora Maki Ortiz, dio verdaderas muestra de civilidad política, y en su organización siempre estuvo primero los ciudadanos de reynosenses, la seguridad pública, protección civil, salud y educación, fueron tareas esenciales que jamás se dejaron de atender por la veda electoral.
Una vez concluida la veda, sin que esto allá sido motivo para el descanso, la alcaldesa dio y giro las instrucciones para que la ciudad vuelva a la normalidad administrativa y laboral, dentro de los órganos municipales.
Después de las elecciones los retos de Reynosa aumentan, se contempla un cierre en obras y servicios, dándole certidumbre a la administración entrante.