Por: Chano Rangel
Claro pero muy claro está, que el que tiene la mayoría de votos, no necesariamente tiene el poder, Morena si gano 11 gubernaturas el pasado 6 de junio, pero perdió más de 15 millones de votos, de una elección a otra, y por si fuera poco fue apabullado en corazón electoral, la ciudad de México y los estados conurbados, donde la Alianza opositora a la 4T, les dio terrible barrida.
Hubo daños colaterales, uno de ellos fue Gabriel García Hernández, con oficina a lado del presidente, y quien fungía como el operador de los súper delegados y servidores de la nación, en otras palabras la estructura electoral de Morena. Hernández, fue renunciado, a la jefa de gobierno le impusieron al secretario general de gobierno, y le enviaron desde el senado a un hombre de todas las confianzas de AMLO, Martí Batres, para que acomode los platos rotos y sea el interlocutor con el congreso local, el cual tampoco tendrá en su poder la jefa de gobierno, porque lo perdió en las elecciones intermedias.
Pero la gubernaturas se comportó de manera distinta a la elección federal; como lo adelantamos en esta columna, donde vaticinamos que la elección sería diametralmente opuesta. Y así fue, el congreso federal quedó partido en 3, y el país con los gobernadores se dividió en 2 partes, con el PAN, PRI, MC y Morena, de la oposición tiene en su poder la mitad de las entidades y la otra mitad en manos de la 4T.
El meollo del asunto, no son los votos, si no las mentiras ¿Quién mintió? Su Quirino Ordaz Coppel, era un gobernador en el top 5, porque entonces perdió la gubernatura el PRI en Sinaloa, en manos de un líder sexagenario llamado Rubén Rocha Moya, con méritos impronunciables, represivo y oportunista.
Lo mismo pasó en Sonora, donde Claudia Pavlovich, se jactaba de estar muy bien evaluada por los ciudadanos, y el candidato opositor con todo el desastre nacional de seguridad pública, era blanco fácil de una derrota, pero no fue así, Alfonso Durazo, batallo pero ganó con poco margen, pero se le dio la victoria que ansiaba desde la época de Luis Donaldo Colosio, de quien fue su secretario.
De Nayarit y el panista Antonio Chavarría se sabía de su cambio de ideología, quien llegó por el PAN, pero desde que AMLO, llegó a la presidencia este se convirtió en más morenista que mucho de los cercanos al mandatario. Pero no pasó lo mismo en Colima, donde Nacho Peralta, se vanagloriaba de haber ganado la gubernatura dos veces, contra el panista Jorge Luis Preciado, panista aguerrido, que al final sucumbió ante los embates del priismo nacional. Pero la historia le cambió la cara a Peralta, y fue aplastado por Morena y su candidata Indira Vizcaíno.
Las encuestas en estos estados, o estaban trucadas o eran falsas, porque los resultados fueron muy distintos, porque donde se vio una realidad distinta fue en Querétaro, donde Pancho Domínguez, el gobernador mejor evaluado del país, puso el sello de la casa y el candidato azul Mauricio Kuri, pateando un bote ganó la gubernatura, con el porcentaje de votos más amplio de la elección del pasado 6 de junio.
Chihuahua no fue la excepción, el gobernador Corral, dejó correr a Maru Campos, después de verse derrotado con su alfil, Gustavo Madero, quien mordió el polvo en las internas del PAN en ese estado, inteligentemente Javier Corral, se quitó de encima a Madero y ganó con Maru la gobernación de su estado.
En la entidad las acciones fueron divididas, los ataques al gobernador desde Palacio Nacional, hicieron lo que la gota de agua a la piedra, causaron un agujero y el panismo luchó hasta el final y logro quedarse con 29 alcaldías y 14 diputaciones locales, nada para mal, para la barrida que se esperaba, si es cierto, se perdieron las más grandes y emblemáticas, pero a la hora de promover leyes, los cabildos cuentan por igual.
La mata sigue dando, en el 2022, se renovará la gubernatura de Tamaulipas, el gobernador se mantiene bien evaluado, algo que debe de servir para el análisis y toma de nota, quienes tienen las decisiones en el estado, lo que pasó el 6 de junio es una muestra clara, que aún falta trabajo político por hacer.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
La alcaldesa de Reynosa Maki Ortiz, anuncio que será a partir del 13 de septiembre que se reiniciara la segunda etapa de vacunación en la ciudad de 18 a 39 años; con lo que cumplirá la segunda parte de la dosis del anticuerpo para prevención del covid-19.
En este orden la demanda de la vacuna Pfizer en la frontera trajo consigo que muchos jóvenes de otras ciudades no fronterizas acudieran hasta las sedes fronterizas, muchos habitantes de Méndez, Burgos, Cruillas, San Fernando, Soto La Marina, Abasolo y Jiménez, se volcaron a la aplicación de la primera dosis hasta estas ciudades, provocando también gran aglomeraciones de personas en casi todos los puntos de vacunación.
El auditorio municipal de Reynosa, tuvo una enorme demanda, hasta donde la autoridad municipal acudió para brindar ayuda con agua embotellada, y con ello mitigar el fuerte calor.
Lo mismo ocurrió en Matamoros, el centro de convenciones Mundo Nuevo, tenía más de 6 mil personas en fila, muchos locales, pero una gran cantidad provenientes de ciudades vecinas, fuera con allá sido, el éxito y la respuesta de los jóvenes, da una esperanza para contrarrestar el virus en su tercera ola, que dejado desolación en todo el país.