Por: Chano Rangel
Algo paso que el país se está convulsionando, la galvanización política y la férrea idea del presidente de desmantelar los poderes de la unión a puesto de manifiesto a un país, que le retiro su apoyo, ya no cuenta con la mayor en las encuestas, que ahora ya no le gustaron, incluso aquellas empresas que el mismo aplaudía.
El Financiero, periódico de clase nacional, con uno de los departamentos de medición más certeros, le da solo un 44% de aprobación para la reforma al poder judicial, claro está que los foros de consulta fueron solo una farsa, donde no se les dio el respeto y los espacios a verdaderos expertos en material judicial; sin embargo, el presidente ya había decretado, que sin importar que fuera de los foros, la reforma iba por que iba, me canso ganso, le falto decir.
Con estas acciones, nada o poco espacio de maniobra le deja López Obrador a la presidente electa para definir el rumbo del país, en presidente quiere terminar su venganza política antes de irse, no deja nada para que la próxima presidenta elija y maniobre para su gobierno, que está por iniciar, el presidente solo piensa en él, en su forma unipersonal de pensamiento y su rencor para acabar con uno de los poderes de la unión.
Tristeza da ver a diputados con maestrías en derecho, con doctorados asegurar que la reforma propuesta por el presidente es al mejor de la historia, solo pro ganar el aprecio del líder moral del morenismo, que aberrante es que la lisonja el gane al pensamiento, y que el servilismo político este por encima de los intereses de la nación.
El pueblo de Chalco y sus calles inundadas de aguas negras, Acapulco y el huracán Otis, definen muy bien la importancia del pueblo para un presidente vengativo, en la perla del pacifico, aún hay familias viviendo en la calle, el hermoso puerto y su bahía no se ven igual, y la quebrada esta, más quebrada que nunca; las inversiones y el turismo aun no regresan al icónico Acapulco, mientras el huracán pegaba fuerte, la gobernadora andaba con su pareja sentimental disfrutando de la vida, esa es la visión de la izquierda, pero si hubiera sido la oposición, ya estuvieran en juicio político por irresponsable, pero acá no, la ley y la gracia son solo para los amigos.
Lo dramático está en Chalco, donde a tres semanas de las lluvias, aún hay muchas zonas con aguas negras, en lugar de ser atendidos, el presidente en la mañanera difundió un video de López-Doriga acusándolo de tendencioso, de mala lecha y cuanta cosa se le ocurrió al mandatario, pero jamás habla de resolver el problema, tampoco dijo nada de la gobernadora Delfina Gómez, y mucho menos a la Comisión Nacional del Agua, nadie es culpable en la 4T, el responsable es el periodista Joaquín López-Doriga, por decir la verdad.
En este nuevo esquema la culpa la tienen todos, nadie asume una responsabilidad, se sigue acusando al pasado por todo, y si no queda de otra, se impide y se agrede a los mensajeros, a los periodistas y a los ciudadanos por andar criticando.
No una responsabilidad gubernamental por nada, solo se ataca, y como la venganza a la Suprema Corte, define mucho un gobierno que está a seis semanas de irse, pero que al final de su ejercicio, quiere desmantelar al país para allanar el camino a un gobierno presidencialista, dándole un retroceso al país de más de 60 años.
El presidente debería de recordar, que ya alguna vez la Corte fue sumisa al presidente, y se cometieron atropellos históricos en contra de campesinos, lideres sociales y muchos ciudadanos, para eso se luchó, lucha que lo llevo al mismo que hoy gobierna a incendiar pozos petroleros, pero eso ya se olvidó, ahora que la izquierda llego al poder, intenta quemar el puente, derribarlo para que nadie más en algunos sexenios pueda llegar al poder fácilmente.
Comenzó vengativo el sexenio, termina con odios y venganzas, el pensar distinto, es una afrenta para el mandatario, la Corte lo vive hoy, todo el poder del estado está en su contra, en una de las felonías más grandes de la historia de este país.
Es cuánto.
De Aquello y lo demás…
Después de los asuntos y problemáticas de las lluvias en norte de Tamaulipas, hoy en día Reynosa, está pasando por momentos difíciles en el abasto de agua potable, el alcalde Carlos Peña Ortiz, ha coordinado de manera personal los equipos de trabajo para llevar agua potable en la medida de lo posible a las familias en todos los rincones de la ciudad.
La crisis hídrica ha alcanzado a muchas ciudades, en San Fernando, por ejemplo, también se raciona el agua, y solo por la mañana y la noche se da el abasto en algunas zonas, otras durante el día, solo por citar y un ejemplo. Sin embargo, Reynosa, la ciudad más grande de Tamaulipas, también tiene problemas serios en el abasto, el edil Peña Ortiz, dando la cara al ciudadano enfrenta esta crisis de agua, que no es su culpa, por la falta de líquido, pero si ha tomado en sus manos la problemática, dándole soluciones al alcance municipal del problema.
Claro está que muchos de sus adversarios políticos, han aprovechado esta situación para llevar el ataque a lo público, acusando al edil reynosense de todo y por todo, hasta por la falta de lluvias y de reservas de agua, pero estos mismos adversarios, pierden objetividad cuando no dan argumentos de sus ataques, es solo por opinar, y a últimas fechas estos adversarios se han convertido en expertos en recursos hidráulicos.
Criticar es fácil, lo importante seria aportar soluciones y no solo criticar y atacar, en una ciudad como Reynosa, liderada por un alcalde que cuenta con la confianza ciudadana, así lo demuestran 151 mil votos obtenidos en la reelección, los adversarios políticos deberían de contribuir con ideas, proyectos y soluciones, porque la crítica visceral, nada aporta a las familias reynosenses.