Ciudad Victoria, Tam.- “Por órdenes de arriba” – entiéndase el alcalde Eduardo Gattás Báez – una oficinista del DIF Victoria ha sufrido represión, discriminación, hostigamiento y violencia laboral en represalia por haber denunciado en su perfil personal de Facebook, la negativa del ayuntamiento a proporcionarle medicamentos para su hijo enfermo.
Luego de que la trabajadora, en un acto de impotencia y desesperación hizo esa publicación, la Presidenta del DIF Victoria Lucía Rodríguez de Gattás la puso a disposición del Departamento de Recursos Humanos.
Acatando la instrucción, el Oficial Mayor Daniel Fuentes Navarro, a través del Titular de Recursos Humanos Jorge Villarreal Rodríguez, la canalizó a Barrido Manual, sin hacer una investigación ni darle una explicación a la trabajadora de porqué sería reasignada.
En una clara y reiterada violación a sus derechos, el Secretario de Servicios Públicos del Municipio Mauricio Valdez Sánchez, le dijo a la trabajadora que, “por órdenes de arriba, ya no laboraría como oficinista, que tenía la instrucción de mandarla a barrer las calles y que además, tendría que enviarle fotos realizando sus nuevas funciones para mostrar las imágenes a sus Jefes”.
Después de que la trabajadora se negó a desarrollar labores distintas a las que señala su nombramiento, el Secretario de Servicios Públicos le impidió el acceso a las oficinas de Barrido Manual, y la mantuvo a la intemperie, expuesta a las altas temperaturas durante más de una semana.
Como consecuencia de la violencia laboral ejercida por los funcionarios municipales, la trabajadora se enfermó; contrajo un herpes debido a tanto estrés.
A pesar del mal estado de salud de la trabajadora, el Secretario de Servicios Públicos continuó el hostigamiento contra ella; sin tener facultades para hacerlo, la canalizó al Departamento de Relleno Sanitario.
El Sindicato de Trabajadores del Municipio de Victoria solicitó a la Oficialía Mayor, el oficio de dicha comisión y una carta responsiva donde el Ayuntamiento se haga responsable de la seguridad de la trabajadora, considerando los riesgos existentes en el Relleno Sanitario y a los que quedará expuesta al enviarla a un lugar tan peligroso como ese.
La represión, la violencia de género y laboral contra el personal sindicalizado del Ayuntamiento de Victoria ha llegado a niveles inadmisibles, afirmó la dirigente sindical Laura Infante.
Advirtió que no permitirán que se sigan vulnerando los derechos humanos de las trabajadoras y de los trabajadores.